Abarth 595C Pista 1.4 16v T-JET 118 kW (160 CV) Cambio Secuencial Robotizado · 160 CV (2019-2021)

2016
Gasolina
FWD
Manual 5v
Abarth 595 - Vista 1
Abarth 595 - Vista 2
Abarth 595 - Vista 3

Especificaciones y análisis del Abarth 595

Potencia

160CV

Par

230Nm

Consumo

7.4l/100

Emisiones

165g/km

0-100 km/h

7.3s

Vel. Máx.

216km/h

Peso

1150kg

Precio

27,950

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Manual 5v

Tracción

FWD

Plazas

4 / 2 puertas

Maletero

185 L

Depósito

35 L

Potencia

118 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima160 CV / 118 kW
Par máximo230 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito35 L
Maletero185 L

Análisis detallado del Abarth 595C Pista 1.4 16v T-JET 118 kW (160 CV) Cambio Secuencial Robotizado · 160 CV (2019-2021)

Descripción general

El Abarth 595C Pista es la encarnación del veneno del escorpión en un frasco pequeño y descapotable. No es simplemente un coche, es una declaración de intenciones, un juguete para adultos diseñado para inyectar pura adrenalina en cada trayecto. Con su motor 1.4 T-JET de 160 caballos y su carácter rebelde, promete una experiencia de conducción que apela directamente al corazón.

Experiencia de conducción

Ponerse al volante del 595C Pista es despertar los sentidos. El rugido del escape inunda el habitáculo, especialmente a cielo abierto, convirtiendo cada aceleración en un evento sonoro. Sus 160 CV empujan con una energía sorprendente para su tamaño, catapultándote de 0 a 100 km/h en solo 7.3 segundos. La dirección es directa y comunicativa, y la suspensión firme te conecta de manera visceral con el asfalto. El cambio secuencial robotizado añade un toque de competición, exigiendo tu atención y recompensándote con una sensación de control mecánico y puro, una experiencia cada vez más rara en el mundo moderno.

Diseño y estética

Su diseño es puro músculo italiano en formato de bolsillo. Partiendo de la icónica silueta del Fiat 500, Abarth lo transforma con paragolpes agresivos, llantas de 17 pulgadas que llenan los pasos de rueda y detalles exclusivos de la versión Pista. Cada insignia del escorpión es un recordatorio de su linaje de competición. La capota de lona no solo le da un toque de elegancia y libertad, sino que acentúa su perfil juguetón y desafiante. Es un coche que no pide permiso, simplemente atrae todas las miradas con su carisma.

Tecnología y características

La tecnología en el Abarth 595C Pista está al servicio de la emoción, no de la distracción. Si bien cuenta con un sistema de infoentretenimiento para las necesidades básicas de conectividad, su verdadera proeza tecnológica reside en la mecánica. El motor turboalimentado con inyección indirecta, la suspensión deportiva con una puesta a punto específica y un sistema de frenos sobredimensionado con discos ventilados son el corazón tecnológico que define su comportamiento. Es una máquina donde la ingeniería se enfoca en maximizar las sensaciones y el rendimiento en cada curva.

Competencia

En su exclusivo nicho de pequeños deportivos pasionales, el 595C Pista se enfrenta a rivales con carácter. El MINI Cooper S Cabrio es su competidor más directo, ofreciendo una mezcla similar de prestaciones, estilo premium y conducción a cielo abierto, aunque con un enfoque quizás más refinado. Por otro lado, el Ford Fiesta ST, aunque sin opción descapotable, lucha en el mismo terreno de la diversión al volante y la agilidad, representando una alternativa formidable en cuanto a chasis y dinámica. Ambos son grandes coches, pero pocos capturan la esencia ruidosa y descaradamente italiana del Abarth.

Conclusión

El Abarth 595C Pista no es una compra que se justifique con la lógica. Su maletero es pequeño, su consumo puede ser elevado si se le exige y su practicidad es limitada. Sin embargo, es una de las compras más pasionales que se pueden hacer. Es un antídoto contra el aburrimiento, un concentrado de carácter y sonido que garantiza una sonrisa en cada kilómetro. Es la elección perfecta para quien busca un segundo coche de disfrute o para quien valora la emoción pura de conducir por encima de todo lo demás.