Alfa Romeo 166 2.5 V6 24v 192 CV Progression (2003-2004)

2004
Gasolina
FWD
Manual 6v
Alfa Romeo 166 - Vista 1
Alfa Romeo 166 - Vista 2
Alfa Romeo 166 - Vista 3
Alfa Romeo 166 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Alfa Romeo 166

Potencia

188CV

Par

221Nm

Consumo

11.9l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

8.4s

Vel. Máx.

225km/h

Peso

1565kg

Precio

36,500

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Manual 6v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 4 puertas

Maletero

490 L

Depósito

69 L

Potencia

138 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima188 CV / 138 kW
Par máximo221 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónManual 6v

Capacidades

Depósito69 L
Maletero490 L

Análisis detallado del Alfa Romeo 166 2.5 V6 24v 192 CV Progression (2003-2004)

Descripción general

El Alfa Romeo 166 representa la culminación de la berlina ejecutiva a la italiana. En su versión de 2004, renovada y más seductora que nunca, este buque insignia no era solo un medio de transporte, sino una declaración de principios. Con el legendario motor V6 'Busso' latiendo bajo el capó, el 166 prometía un viaje donde la elegancia y la pasión por la conducción se daban la mano en cada curva.

Experiencia de conducción

Ponerse al volante del 166 V6 es una experiencia que inunda los sentidos. El simple acto de girar la llave despierta un bramido ronco y melódico que eriza la piel. El motor de 2.5 litros y 188 caballos empuja con una progresividad adictiva, pidiendo ser llevado a la zona alta del cuentavueltas. La caja de cambios manual de seis velocidades ofrece un tacto mecánico y preciso, mientras que su sofisticada suspensión de paralelogramo deformable en ambos ejes dibuja las carreteras con una agilidad y aplomo sorprendentes para una berlina de su tamaño. No solo se conduce, se siente.

Diseño y estética

El diseño del Alfa 166 es pura escultura italiana en movimiento. La actualización de 2004 le otorgó un frontal imponente y carismático, con el 'scudetto' más grande y unos faros afilados que le confieren una mirada agresiva y penetrante. Su línea lateral es fluida y elegante, culminando en una zaga limpia y personalísima. Por dentro, el ambiente envuelve al conductor en un puesto de conducción orientado al placer, con relojes clásicos hundidos y una consola central que, en su día, era el corazón tecnológico del coche. Es un diseño que ha envejecido con una gracia excepcional, un clásico atemporal.

Tecnología y características

Más allá de su belleza, el 166 escondía una ingeniería notable para su época. El verdadero corazón tecnológico era su tren motriz y su chasis. El motor V6 'Busso' de 24 válvulas era una obra de arte mecánica, y su combinación con una avanzada suspensión de paralelogramo deformable tanto delantera como trasera era una solución técnica propia de coches de competición, buscando la máxima eficacia dinámica en un tracción delantera. Este esquema, junto a los frenos de disco de generoso tamaño, demostraba que la prioridad de Alfa Romeo era crear una experiencia de conducción superior.

Competencia

En el competitivo ruedo de las berlinas ejecutivas, el Alfa Romeo 166 se enfrentó a los titanes alemanes como el BMW Serie 5, el Mercedes-Benz Clase E y el Audi A6. Mientras sus rivales apostaban por la sobriedad, la tecnología apabullante o el confort absoluto, el 166 jugó la carta de la emoción y el estilo. Era la alternativa para quien buscaba diferenciarse, para el conductor que valoraba el 'cuore sportivo' y el diseño con alma por encima de la fría perfección germánica, compitiendo también con la elegancia británica del Jaguar S-Type.

Conclusión

El Alfa Romeo 166 2.5 V6 no es simplemente un coche, es una experiencia, un pedazo de la historia automotriz italiana. Es una berlina que eliges con el corazón, seducido por el canto de su motor y la belleza de sus líneas. Representa una forma de entender el automóvil que prioriza la pasión y las sensaciones. Hoy, es un futuro clásico que ofrece un carácter y un alma que muchos coches modernos han perdido, una máquina para disfrutar, cuidar y, sobre todo, sentir en cada kilómetro.