Especificaciones y análisis del Aston Martin DB9
Potencia
455CV
Par
570Nm
Consumo
-l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
4.9s
Vel. Máx.
300km/h
Peso
1785kg
Precio
172,062€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 6v
RWD
4 / 2 puertas
186 L
80 L
335 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Aston Martin DB9 Coupe · 455 CV (2005-2006)
Descripción general
El Aston Martin DB9 de 2004 es una obra de arte automotriz, un coupé que encarna la elegancia británica y la potencia desmedida. Con su motor V12 de 5.9 litros y 455 CV, este coche no es solo un medio de transporte, sino una declaración de intenciones, un sueño sobre ruedas que te invita a vivir la carretera de una manera única y apasionada. Su precio de 172.062 € en su momento lo posicionaba como un objeto de deseo para unos pocos afortunados, una inversión en puro placer de conducción.
Experiencia de conducción
Ponerse al volante del DB9 es una experiencia que te envuelve. El rugido de su motor V12 es una sinfonía para los amantes de la velocidad, una promesa de emociones fuertes. Acelera de 0 a 100 km/h en solo 4.9 segundos y alcanza una velocidad máxima de 300 km/h, cifras que te pegan al asiento y te hacen sentir la adrenalina correr por tus venas. La dirección, aunque no se especifica su tipo, es sensible a la velocidad, lo que sugiere una conexión íntima con el asfalto. La suspensión de paralelogramo deformable en ambos ejes, junto con las barras estabilizadoras, garantiza un comportamiento dinámico excepcional, ofreciendo un equilibrio perfecto entre confort y deportividad. Cada curva se convierte en una danza, cada recta en una oportunidad para desatar su poderío. Es un coche que te hace sentir vivo, que te conecta con la carretera de una manera visceral.
Diseño y estética
El diseño del Aston Martin DB9 es atemporal, una fusión perfecta de líneas clásicas y modernidad. Su silueta coupé es elegante y musculosa a la vez, con proporciones que evocan velocidad y sofisticación. Los faros, la parrilla distintiva y las tomas de aire laterales no solo cumplen una función estética, sino que también contribuyen a su aerodinámica. Con 4710 mm de largo, 1875 mm de ancho y 1270 mm de alto, su presencia es imponente. Las llantas de 19 pulgadas, con neumáticos 235/40 R19 Z delante y 275/35 R19 Z detrás, no solo realzan su estética deportiva, sino que también son cruciales para su agarre y estabilidad. Cada detalle, desde la forma de los espejos hasta la integración de los escapes, ha sido cuidadosamente pensado para crear una obra de arte rodante que atrae miradas allá por donde pasa.
Tecnología y características
Bajo su piel elegante, el DB9 de 2004 esconde una ingeniería avanzada para su época. Su motor V12 de 5935 cc, con inyección indirecta y una relación de compresión de 10.3, es una maravilla mecánica. La construcción en aluminio tanto del bloque como de la culata contribuye a un peso contenido para un coche de su tamaño y potencia (1785 kg). La transmisión manual de 6 velocidades, aunque no se especifica el tipo de embrague, ofrece un control total sobre la entrega de potencia, permitiendo al conductor exprimir al máximo cada una de las 455 CV. Los frenos de disco ventilados de 355 mm delante y 330 mm detrás garantizan una capacidad de frenado excepcional, crucial para domar tanta potencia. Aunque carece de las ayudas electrónicas más modernas, su tecnología se centra en la pureza de la conducción y la conexión mecánica entre el hombre y la máquina.
Competencia
En su lanzamiento, el Aston Martin DB9 se enfrentaba a rivales de la talla del Ferrari 612 Scaglietti, el Bentley Continental GT y el Mercedes-Benz CL 600. Cada uno ofrecía su propia interpretación del gran turismo de lujo y altas prestaciones. El Ferrari destacaba por su pedigrí deportivo y su motor V12 aún más potente, el Bentley por su opulencia y confort, y el Mercedes por su tecnología y refinamiento. Sin embargo, el DB9 se distinguía por su elegancia británica inconfundible, su equilibrio entre deportividad y lujo, y esa sensación de exclusividad que solo un Aston Martin puede ofrecer. Era la elección para aquellos que buscaban un coche con alma, una máquina que combinara la emoción de un deportivo con la sofisticación de un gran turismo.
Conclusión
El Aston Martin DB9 de 2004 es mucho más que un coche; es una leyenda, un icono del automovilismo que sigue cautivando corazones. Su combinación de diseño sublime, prestaciones emocionantes y un aura de exclusividad lo convierten en un clásico instantáneo. Es un coche para disfrutar, para sentir, para vivir la carretera con una intensidad que pocos vehículos pueden ofrecer. Aunque su consumo no sea su punto fuerte y su mantenimiento pueda ser elevado, la experiencia de poseer y conducir un DB9 es incomparable, una inversión en pasión y estilo que perdura en el tiempo. Es un testimonio de la artesanía y la ingeniería británicas, un coche que te hace soñar despierto.




