Especificaciones y análisis del Aston Martin Vantage
Potencia
426CV
Par
470Nm
Consumo
12.6l/100
Emisiones
295g/km
0-100 km/h
4.9s
Vel. Máx.
290km/h
Peso
1785kg
Precio
152,754€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 6v
RWD
2 / 2 puertas
144 L
80 L
313 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Aston Martin Vantage Roadster Sportshift · 426 CV (2012-2013)
Descripción general
El Aston Martin Vantage Roadster es la encarnación del gran turismo británico, una sinfonía de potencia y elegancia a cielo abierto. Lanzado en una era donde el carácter del motor lo era todo, este modelo de 2012 combina un diseño atemporal con el corazón palpitante de un V8 de 4.7 litros y 426 caballos. No es solo un coche, es una declaración de intenciones, una invitación a sentir la carretera sin filtros y con el máximo estilo.
Experiencia de conducción
Conducir el Vantage Roadster es una experiencia visceral que te atrapa desde el momento en que el V8 despierta con un rugido profundo y adictivo. Cada aceleración es un empuje contundente que te pega al asiento, alcanzando los 100 km/h en menos de 5 segundos mientras la melodía del escape inunda el habitáculo. La dirección hidráulica, precisa y comunicativa, te conecta directamente con el asfalto, y su tracción trasera te invita a jugar en cada curva. Con la capota bajada, el viento, el sol y el sonido del motor se fusionan para crear una libertad indescriptible, un placer de conducción puro y casi olvidado.
Diseño y estética
Su silueta es una obra de arte en movimiento. Las proporciones son perfectas: un capó largo y musculoso que alberga la joya mecánica, un habitáculo biplaza recogido y una zaga corta y poderosa. Cada línea fluye con una elegancia atlética que ha resistido el paso del tiempo de manera excepcional. Por dentro, te abraza un ambiente de lujo artesanal, con cuero cosido a mano y metales pulidos que recuerdan que estás en un coche especial, construido con pasión y atención al detalle.
Tecnología y características
La tecnología del Vantage no reside en pantallas táctiles, sino en su brillante ingeniería mecánica. El alma del coche es su motor V8 atmosférico de aluminio, una pieza de orfebrería diseñada para entregar potencia de forma lineal y emocionante hasta las 7300 rpm. El chasis, con su suspensión de paralelogramo deformable en ambos ejes y sus potentes frenos, está afinado para ofrecer un equilibrio sublime entre confort y deportividad. La caja de cambios Sportshift, aunque automática, ofrece una conexión directa que exige implicación del conductor, reforzando el carácter analógico y purista del conjunto.
Competencia
En su época, el Vantage Roadster se medía con titanes como el Porsche 911 Carrera S Cabriolet o el Audi R8 Spyder. Mientras que sus rivales alemanes a menudo destacaban por su perfección clínica y su tecnología abrumadora, el Aston Martin ofrecía un alma diferente. Era la opción para quien buscaba no solo prestaciones, sino también una belleza atemporal, un sonido inolvidable y la sensación de conducir una pieza de historia del automovilismo británico, un coche con una personalidad única e irrepetible.
Conclusión
El Aston Martin Vantage Roadster es mucho más que un deportivo descapotable; es una cápsula del tiempo que celebra la emoción pura de la conducción. Es un coche que se compra con el corazón, que te recompensa con sensaciones y no solo con cifras. Su diseño icónico, el bramido de su V8 y su carácter analógico lo convierten en un clásico moderno desde el día que salió de fábrica. Poseerlo es un privilegio que te conecta con la esencia más romántica del automóvil.