Bentley Arnage Long Wheelbase · 406 CV (2002-2004)

2002
Gasolina
RWD
Automático 4v
Bentley Arnage - Vista 1
Bentley Arnage - Vista 2
Bentley Arnage - Vista 3
Bentley Arnage - Vista 4

Especificaciones y análisis del Bentley Arnage

Potencia

406CV

Par

835Nm

Consumo

20.6l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

6.3s

Vel. Máx.

249km/h

Peso

2655kg

Precio

327,155

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 4v

Tracción

RWD

Plazas

5 / 4 puertas

Maletero

374 L

Depósito

100 L

Potencia

298.3 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima406 CV / 298.3 kW
Par máximo835 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 4v

Capacidades

Depósito100 L
Maletero374 L

Análisis detallado del Bentley Arnage Long Wheelbase · 406 CV (2002-2004)

Descripción general

El Bentley Arnage Long Wheelbase de 2002 no es simplemente un coche, es una declaración de intenciones, la máxima expresión del lujo y la opulencia británica de principios de siglo. Concebido para quienes no solo viajan, sino que se desplazan en una esfera de confort y exclusividad inigualables, su imponente presencia y su batalla extendida prometen una experiencia sublime, especialmente para los afortunados ocupantes de las plazas traseras.

Experiencia de conducción

Ponerse al volante o ser transportado en el Arnage es un acontecimiento. El colosal motor V8 de 6.8 litros y 406 caballos empuja con la fuerza de una marea imparable, un torrente de 835 Nm de par que mueve sus más de 2.6 toneladas con una ligereza pasmosa. La aceleración es un susurro poderoso que te pega al asiento sin violencia, alcanzando los 100 km/h en 6.3 segundos. No es la agilidad de un deportivo, es la sensación de un poder ilimitado y refinado, un yate de lujo surcando el asfalto mientras el mundo exterior se desvanece en un silencio casi absoluto, envuelto en cuero y madera.

Diseño y estética

El diseño del Arnage Long Wheelbase es una obra de arte atemporal que impone respeto. Sus casi 5.7 metros de longitud dibujan una silueta majestuosa, dominada por la icónica parrilla Bentley y los faros cuádruples que le confieren una mirada inconfundible. Cada línea fluye con una elegancia clásica y poderosa. El interior es un santuario de la artesanía, un espacio donde cada detalle ha sido cuidado con esmero: maderas nobles pulidas a mano, cueros exquisitos cosidos con precisión y metales que brillan con una calidad que se puede sentir. Es un coche que te abraza con lujo.

Tecnología y características

En su época, el Arnage representaba una fusión magistral entre la tradición mecánica y la tecnología de confort. Su corazón, el legendario V8 'seis y tres cuartos', fue modernizado con turbo e inyección para entregar un rendimiento soberbio. El chasis, con suspensiones de paralelogramo deformable en ambos ejes, garantizaba un confort de marcha imperial. Aunque carece de las pantallas digitales modernas, su tecnología se centraba en la excelencia mecánica y en crear una atmósfera perfecta para sus ocupantes, con un sistema de climatización y sonido de altísima fidelidad. Su transmisión automática de 4 velocidades, aunque pueda parecer arcaica, está perfectamente calibrada para gestionar la inmensa fuerza del motor con suavidad.

Competencia

En el exclusivo olimpo de las berlinas de ultra-lujo, el Arnage Long Wheelbase se enfrentaba a muy pocos. Su competidor más directo era el Rolls-Royce Silver Seraph Park Ward, con el que compartía una filosofía de confort absoluto, aunque con un carácter menos enfocado en el conductor. Otro gran rival fue el Maybach 57, el intento de Mercedes-Benz por redefinir la opulencia con un despliegue tecnológico superior. Sin embargo, el Bentley siempre conservó su alma única, una mezcla de herencia deportiva y lujo aristocrático que lo hacía irresistiblemente carismático.

Conclusión

El Bentley Arnage Long Wheelbase es mucho más que un medio de transporte; es un legado rodante, un monumento a una era de opulencia sin complejos. Representa la cúspide de la ingeniería y la artesanía británica, ofreciendo una experiencia emocional y un sentido de la ocasión en cada viaje. Para el conocedor que valora la fuerza bruta, el confort supremo y un estilo imperecedero, el Arnage no es una elección, es un destino. Un clásico eterno que sigue evocando admiración y deseo.