Especificaciones y análisis del Bentley Mulsanne
Potencia
513CV
Par
1020Nm
Consumo
16.9l/100
Emisiones
393g/km
0-100 km/h
5.3s
Vel. Máx.
296km/h
Peso
2585kg
Precio
336,362€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 8v
RWD
5 / 4 puertas
443 L
96 L
377 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Bentley Mulsanne · 513 CV (2012)
Descripción general
El Bentley Mulsanne de 2010 no es simplemente un coche, es la encarnación del lujo y la potencia británica en su máxima expresión. Como buque insignia de la marca, representa una era de opulencia y rendimiento sin concesiones. Bajo su imponente capó late un corazón legendario: un motor V8 de 6.8 litros que entrega 513 caballos de pura fuerza, un testamento a la ingeniería artesanal que define a Bentley. Su presencia en la carretera es una declaración de estatus y un viaje a un mundo de exclusividad inigualable.
Experiencia de conducción
Ponerse al volante del Mulsanne es desconectar del mundo exterior y sumergirse en un santuario de silencio y confort. La sensación es la de flotar sobre el asfalto, gracias a una suspensión que borra cualquier imperfección del camino. Sin embargo, una leve presión sobre el acelerador desata una ola de par motor de 1020 Nm que te empuja contra el asiento con una fuerza tan masiva como refinada. No es una aceleración brusca, sino una marea imparable de potencia que te transporta con la majestuosidad de un jet privado. Es una dualidad emocionante: la serenidad de una limusina y el alma de un deportivo de gran turismo.
Diseño y estética
El diseño del Mulsanne es una obra de arte atemporal. Sus líneas fluidas y su monumental carrocería de más de 5.5 metros de largo proyectan una imagen de poder y elegancia que no deja a nadie indiferente. La icónica parrilla cromada y los faros redondos son un claro homenaje a la herencia de la marca. Pero es en su interior donde el alma del Mulsanne se revela por completo. Cada centímetro está revestido con las maderas más nobles y los cueros más suaves, ensamblados a mano por artesanos. Sentarse dentro es una experiencia sensorial, un abrazo de lujo y tradición que te hace sentir parte de algo verdaderamente especial.
Tecnología y características
Bajo su apariencia clásica, el Mulsanne esconde una sofisticada ingeniería al servicio del confort y el rendimiento. El colosal motor V8 se gestiona a través de una suave transmisión automática de 8 velocidades que hace los cambios imperceptibles. La suspensión neumática adaptativa y la dirección hidráulica con asistencia variable aseguran un control absoluto y una agilidad sorprendente para un vehículo de su tamaño y peso. Aunque no abruma con pantallas digitales, su tecnología se centra en perfeccionar la experiencia de conducción, desde los potentes frenos de disco ventilados hasta los sistemas que garantizan un aislamiento acústico casi perfecto.
Competencia
En el olimpo del superlujo, el Bentley Mulsanne encuentra a su rival más directo en el Rolls-Royce Phantom. Mientras que el Phantom se orienta tradicionalmente hacia el confort absoluto del pasajero, el Mulsanne siempre ha conservado un carácter más enfocado al conductor, ofreciendo una experiencia de conducción más dinámica y deportiva sin sacrificar un ápice de opulencia. Otro competidor de la época fue el Maybach 57/62, que también luchaba por el trono del sedán más lujoso del mundo, aunque el Mulsanne siempre destacó por su combinación única de herencia británica, artesanía y prestaciones.
Conclusión
El Bentley Mulsanne es mucho más que la suma de sus partes. Es un legado sobre ruedas, una celebración de la ingeniería y la artesanía en su forma más pura. Representa la cúspide del concepto 'Grand Tourer', un vehículo capaz de cruzar continentes con una velocidad y un confort que desafían la lógica. Conducirlo o ser transportado en él es un privilegio, una experiencia que conecta con más de un siglo de historia automovilística. Es, sin duda, un icono atemporal, una joya destinada a aquellos que no se conforman con nada que no sea la perfección absoluta.




