Especificaciones y análisis del BMW Serie 3
Potencia
136CV
Par
280Nm
Consumo
5.9l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
10.1s
Vel. Máx.
207km/h
Peso
1535kg
Precio
30,405€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
RWD
5 / 5 puertas
435 L
63 L
100 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del BMW 320d Touring · 136 CV (1999-2001)
Descripción general
El BMW 320d Touring de 1998 representa la esencia de la versatilidad y el dinamismo en un formato familiar. Con su motor diésel de 136 CV, este modelo prometía una combinación atractiva de rendimiento y eficiencia, ideal para quienes buscaban la deportividad característica de BMW sin renunciar al espacio y la practicidad de un familiar. Su llegada al mercado marcó un hito en la oferta de vehículos premium con motorizaciones diésel, consolidando la reputación de la marca bávara en este segmento.
Experiencia de conducción
Al volante del 320d Touring, la experiencia es puramente BMW. La dirección precisa y la suspensión bien ajustada ofrecen una conexión directa con la carretera, transmitiendo confianza y agilidad en cada curva. El motor diésel, con sus 136 CV y 280 Nm de par desde bajas revoluciones, empuja con solvencia, permitiendo adelantamientos seguros y una conducción relajada en autopista. Aunque no es un deportivo puro, su equilibrio dinámico invita a disfrutar de cada trayecto, con una sensación de control y aplomo que pocos familiares de su época podían igualar. El confort en viajes largos es notable, aunque la firmeza de la suspensión puede sentirse en carreteras más irregulares.
Diseño y estética
El diseño del BMW Serie 3 Touring de 1998 es una muestra de elegancia atemporal y funcionalidad. Sus líneas fluidas y proporciones equilibradas le otorgan una presencia distinguida, sin caer en estridencias. La característica parrilla de doble riñón y los faros delanteros, aunque más discretos que en generaciones posteriores, mantienen la identidad de la marca. La silueta familiar se integra armoniosamente, ofreciendo un maletero de 435 litros que, sin ser el más grande de su categoría, resulta muy práctico para el día a día y los viajes. El interior, sobrio y ergonómico, se centra en la funcionalidad y la calidad de los materiales, con un salpicadero orientado al conductor que facilita el acceso a todos los controles.
Tecnología y características
En su época, el BMW 320d Touring incorporaba tecnología avanzada para mejorar la experiencia de conducción y la seguridad. Su motor diésel de 1951 cc con inyección directa, turbo e intercooler era un referente en eficiencia y rendimiento. La transmisión manual de 5 velocidades ofrecía un manejo preciso y una buena gestión de la potencia. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados en ambos ejes y una suspensión bien calibrada que garantizaba un comportamiento dinámico seguro. Aunque carecía de las ayudas a la conducción modernas, su ingeniería mecánica estaba a la vanguardia, proporcionando una base sólida para un coche fiable y agradable de conducir.
Competencia
En el segmento de los familiares premium diésel de su época, el BMW 320d Touring se enfrentaba a competidores de la talla del Audi A4 Avant 1.9 TDI y el Mercedes-Benz Clase C Estate 220 CDI. Cada uno ofrecía su propia interpretación del lujo y la funcionalidad, con el Audi destacando por su tracción quattro opcional y su interior refinado, y el Mercedes por su confort de marcha y su imagen de prestigio. El BMW se diferenciaba por su enfoque más deportivo en la conducción y su equilibrio entre prestaciones y eficiencia, atrayendo a aquellos que valoraban la dinámica de conducción por encima de todo.
Conclusión
El BMW 320d Touring de 1998 es un clásico moderno que aún hoy conserva su atractivo. Es un coche que combina la practicidad de un familiar con el placer de conducir característico de BMW. Su motor diésel, eficiente y con buen rendimiento, junto a un chasis equilibrado y un diseño atemporal, lo convierten en una opción interesante para quienes buscan un vehículo con carácter y funcionalidad. Aunque los años han pasado, su esencia de coche bien construido y gratificante al volante perdura, ofreciendo una experiencia de conducción auténtica y satisfactoria.




