BMW Z4 2.0i · 150 CV (2005-2006)

2003
Gasolina
RWD
Manual 6v
BMW Z4 - Vista 1
BMW Z4 - Vista 2
BMW Z4 - Vista 3
BMW Z4 - Vista 4

Especificaciones y análisis del BMW Z4

Potencia

150CV

Par

200Nm

Consumo

7.5l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

8.2s

Vel. Máx.

220km/h

Peso

1295kg

Precio

34,300

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Manual 6v

Tracción

RWD

Plazas

2 / 2 puertas

Maletero

260 L

Depósito

55 L

Potencia

110 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima150 CV / 110 kW
Par máximo200 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónManual 6v

Capacidades

Depósito55 L
Maletero260 L

Análisis detallado del BMW Z4 2.0i · 150 CV (2005-2006)

Descripción general

El BMW Z4 Coupé 2.0i es la encarnación de la pasión por conducir. No es solo un coche, es una declaración de principios que prioriza la conexión entre el piloto y el asfalto. Con su motor de cuatro cilindros y 150 caballos, esta versión de acceso nos recuerda que la emoción no siempre reside en la potencia bruta, sino en el equilibrio, el diseño y el puro placer de trazar cada curva sintiéndote parte de la máquina.

Experiencia de conducción

Ponerse a los mandos del Z4 es una experiencia visceral. La posición de conducción baja, casi sobre el eje trasero, te conecta directamente con el chasis. Cada cambio de su transmisión manual de seis velocidades es un acto deliberado y mecánico. Aunque sus 150 CV no te pegan al asiento con brutalidad, el motor atmosférico sube de vueltas con alegría y un sonido estimulante. La tracción trasera y una dirección precisa te invitan a bailar en carreteras de montaña, ofreciendo una agilidad y una comunicación que los coches modernos rara vez consiguen transmitir.

Diseño y estética

El diseño del Z4 Coupé es una obra de arte controvertida y atemporal. Nacido en la era de Chris Bangle, sus líneas fluidas, con superficies cóncavas y convexas, crean un juego de luces y sombras que lo convierten en una escultura rodante. El larguísimo capó, la cabina retrasada y la zaga corta definen la silueta de un roadster clásico, pero el techo fijo con su distintiva forma de 'doble burbuja' le añade una rigidez y una personalidad únicas. Es un coche que, dos décadas después, sigue girando cabezas y provocando emociones.

Tecnología y características

En su corazón mecánico, el Z4 2.0i albergaba tecnología avanzada para su época, como la distribución variable Valvetronic en su motor de aluminio. Sin embargo, su mayor virtud tecnológica es la ausencia de las distracciones modernas. No hay pantallas táctiles gigantes ni complejos sistemas de infoentretenimiento. La tecnología está al servicio de la conducción: un chasis afinado, una dirección con asistencia eléctrica bien calibrada y controles de estabilidad que intervienen solo cuando es necesario. Es un coche analógico en un mundo digital, y ahí radica gran parte de su encanto.

Competencia

En su lanzamiento, el Z4 Coupé se enfrentó a rivales de gran calibre. El Audi TT ofrecía un diseño icónico y la seguridad de la tracción Quattro, pero con un tacto menos purista. El Mercedes-Benz SLK apostaba más por el confort y el concepto de descapotable de techo duro. El Nissan 350Z era su contraparte japonesa, más potente y musculoso. Sin embargo, su gran némesis siempre fue el Porsche Cayman, el referente dinámico de la categoría, aunque a un precio considerablemente superior. El Z4 se posicionó como la alternativa pasional y con carácter de BMW.

Conclusión

El BMW Z4 2.0i Coupé es mucho más que la versión de acceso a la gama; es un deportivo auténtico que celebra la esencia de la conducción. Es una compra puramente emocional, un futuro clásico que ofrece sensaciones puras y un diseño que no deja indiferente a nadie. En una era de electrificación y asistencia a la conducción, este Z4 es un refugio para quienes todavía creen que conducir es un arte y un placer, no solo un medio de transporte.