Especificaciones y análisis del BMW Z4
Potencia
306CV
Par
400Nm
Consumo
9.4l/100
Emisiones
219g/km
0-100 km/h
5.2s
Vel. Máx.
250km/h
Peso
1580kg
Precio
53,900€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 6v
RWD
2 / 2 puertas
310 L
55 L
225 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del BMW Z4 sDrive35i · 306 CV (2013-2016)
Descripción general
El BMW Z4 sDrive35i es la encarnación de la libertad sobre cuatro ruedas. Un roadster biplaza que no solo promete, sino que entrega una experiencia de conducción pura y visceral. Es un coche diseñado para sentir la carretera, el viento y el latido de un motor excepcional, una invitación a escapar de la rutina y redescubrir el placer de conducir.
Experiencia de conducción
Ponerse a sus mandos es una explosión de emociones. Los 306 caballos del motor de seis cilindros en línea empujan con una fuerza contundente y lineal desde muy bajas vueltas, catapultándote de 0 a 100 km/h en apenas 5.2 segundos. La tracción trasera y el cambio manual de 6 velocidades crean una conexión mecánica casi perdida en los coches modernos. Cada curva es un diálogo con el asfalto, y la melodía del escape a cielo abierto es una banda sonora adictiva que te eriza la piel.
Diseño y estética
Su diseño es una obra de arte atemporal. El larguísimo capó, la posición de conducción retrasada casi sobre el eje trasero y la zaga corta son las proporciones clásicas de un roadster legendario. Irradia deportividad y elegancia desde cualquier ángulo. El techo duro retráctil le otorga una doble personalidad: la intimidad y seguridad de un coupé y la euforia desatada de un descapotable con solo pulsar un botón.
Tecnología y características
Bajo su escultural carrocería se esconde una ingeniería enfocada en el rendimiento. El corazón es su motor de 3.0 litros con inyección directa y turbo, una joya mecánica construida en aluminio. Aunque no es un coche cargado de las últimas pantallas, su tecnología se centra en lo que importa: un chasis afinado con suspensiones de paralelogramo deformable y una dirección eléctrica precisa que transmite confianza en cada giro.
Competencia
En el exclusivo club de los roadsters deportivos, el Z4 sDrive35i se enfrentó a titanes como el Porsche Boxster, conocido por su equilibrio y agilidad supremos, y el Mercedes-Benz SLK, que apostaba más por el confort y el lujo. Mientras sus rivales tenían sus propias virtudes, el BMW ofrecía una combinación única de potencia bruta, diseño espectacular y un carácter más salvaje y musculoso.
Conclusión
El BMW Z4 sDrive35i es mucho más que un coche; es una máquina de generar sonrisas y recuerdos imborrables. Es un clásico moderno para puristas, un vehículo que prioriza la emoción sobre la razón y la conexión sobre el aislamiento. Representa una era dorada de los motores de combustión y la conducción analógica, una joya para quienes entienden que un coche puede ser una fuente inagotable de felicidad.