Especificaciones y análisis del Caterham Seven
Potencia
173CV
Par
174Nm
Consumo
6.5l/100
Emisiones
148g/km
0-100 km/h
4.8s
Vel. Máx.
209km/h
Peso
-kg
Precio
64,378€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
RWD
2 / 2 puertas
120 L
36 L
127 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Caterham Super Seven 2000 · 173 CV (2022)
Descripción general
El Caterham Super Seven 2000 es la encarnación del automovilismo en su estado más puro. No es un coche, es una declaración de principios, un viaje a la esencia de la conducción donde la conexión entre el hombre, la máquina y el asfalto es total y sin filtros. Un clásico atemporal nacido para emocionar.
Experiencia de conducción
Ponerse a sus mandos es una sobrecarga sensorial. El rugido del motor de 2.0 litros y 173 CV justo delante, la respuesta instantánea del acelerador que te catapulta de 0 a 100 km/h en 4.8 segundos, y el viento golpeando tu cara. Cada curva se siente a través de la dirección sin asistencia, cada cambio de la caja manual de 5 velocidades es un acto deliberado. Es una experiencia visceral, exigente y absolutamente adictiva.
Diseño y estética
Su diseño es una consecuencia directa de su propósito: máxima ligereza y rendimiento. La silueta icónica, con su largo capó, ruedas expuestas y un habitáculo biplaza increíblemente ajustado, no ha cambiado en décadas porque es perfecta. Con solo 3.1 metros de largo, su forma grita agilidad y desprecio por todo lo superfluo. Es belleza funcional en estado puro.
Tecnología y características
La tecnología del Super Seven 2000 no reside en pantallas táctiles ni en asistentes de conducción, sino en la brillantez de su ingeniería mecánica. Su chasis ultraligero, la suspensión de paralelogramo deformable, un motor atmosférico que pide ser llevado a altas revoluciones y una transmisión manual directa son su verdadero arsenal tecnológico. Es un tributo a la era analógica, donde la habilidad del piloto es el único sistema de control.
Competencia
Encontrar un rival directo es casi imposible por su singularidad. Vehículos como el Lotus Elise o el Morgan Plus Four comparten su filosofía de ligereza y placer de conducción, aunque con un enfoque ligeramente más civilizado. Para quienes buscan una experiencia de roadster puro con un presupuesto diferente, el Mazda MX-5 podría ser una puerta de entrada, aunque sin la crudeza y el enfoque radical del Caterham.
Conclusión
El Caterham Super Seven 2000 no es un coche para todo el mundo, ni pretende serlo. Es una compra puramente emocional, un antídoto contra la monotonía del transporte moderno. Es una máquina de fin de semana, un generador de sonrisas y adrenalina que te recuerda por qué te apasiona conducir. Poseer uno es pertenecer a un club muy especial de puristas.




