Chrysler 300C Touring 2.7 V6 · 193 CV (2004-2008)

2005
Gasolina
RWD
Automático 4v
Chrysler 300C - Vista 1
Chrysler 300C - Vista 2
Chrysler 300C - Vista 3
Chrysler 300C - Vista 4

Especificaciones y análisis del Chrysler 300C

Potencia

193CV

Par

257Nm

Consumo

10.8l/100

Emisiones

255g/km

0-100 km/h

11.1s

Vel. Máx.

209km/h

Peso

1852kg

Precio

41,500

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 4v

Tracción

RWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

630 L

Depósito

68 L

Potencia

142 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima193 CV / 142 kW
Par máximo257 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 4v

Capacidades

Depósito68 L
Maletero630 L

Análisis detallado del Chrysler 300C Touring 2.7 V6 · 193 CV (2004-2008)

Descripción general

El Chrysler 300C Touring irrumpió en el mercado europeo como una audaz declaración de intenciones. Con su estética inconfundiblemente americana y unas dimensiones colosales, este familiar no buscaba competir, sino redefinir el concepto de presencia en la carretera. Es un coche que no pide permiso, una berlina de lujo vestida de familiar que evoca una sensación de poder y singularidad desde el primer vistazo.

Experiencia de conducción

Ponerse al volante del 300C Touring es una experiencia de crucero y confort. Su motor V6 de 2.7 litros y 193 caballos mueve sus casi dos toneladas con una calma deliberada, sin prisas. No es un coche de aceleraciones fulgurantes, sino de viajes largos y placenteros por autopista, donde su suspensión absorbe el asfalto y su tracción trasera aporta un aplomo soberbio. La transmisión automática de cuatro velocidades, aunque algo anticuada, contribuye a esa sensación de conducción relajada y señorial, haciéndote sentir el dueño de la carretera.

Diseño y estética

El diseño es su alma y su mayor argumento. Musculoso, de cintura alta, con una parrilla imponente y una mirada que intimida, el 300C parece sacado de una película de gánsteres. La versión Touring añade una zaga alargada que, lejos de restarle carácter, potencia su silueta y le otorga una practicidad inmensa con un maletero de 630 litros. Es una obra de arte rodante que polariza opiniones, un vehículo que se compra con el corazón, para ser visto y admirado por su audacia.

Tecnología y características

Tecnológicamente, el 300C se sentía más anclado en la robustez mecánica que en la vanguardia digital de sus rivales alemanes. Su caja de cambios de convertidor de par y cuatro marchas era funcional pero no refinada. Sin embargo, contaba con elementos de confort y un chasis con suspensiones de paralelogramo deformable en ambos ejes, una solución sofisticada que priorizaba la comodidad de marcha por encima de todo. Era la tecnología justa para disfrutar del viaje sin complicaciones.

Competencia

Aunque por tamaño y segmento se enfrentaba a gigantes como el Audi A6 Avant, el BMW Serie 5 Touring o el Mercedes-Benz Clase E Estate, el Chrysler 300C jugaba en una liga propia. Mientras los alemanes ofrecían eficiencia, tecnología y perfección dinámica, el americano contraatacaba con un carácter arrollador, un espacio interior generoso y una relación precio-presencia imbatible. Era la alternativa emocional para quien no quería seguir al rebaño.

Conclusión

El Chrysler 300C Touring 2.7 V6 es mucho más que un coche; es una experiencia, un símbolo de individualidad. No es el más rápido, ni el más eficiente, pero su capacidad para hacerte sentir especial es innegable. Combina la practicidad de un gran familiar con el carisma de un 'muscle car', ofreciendo confort, espacio y una estética que jamás pasará de moda. Una elección para valientes, para aquellos que entienden que conducir también es una forma de expresión.