Especificaciones y análisis del Chrysler Voyager
Potencia
152CV
Par
226Nm
Consumo
12.5l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
-s
Vel. Máx.
177km/h
Peso
-kg
Precio
29,890€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 4v
FWD
7 / 5 puertas
1290 L
75 L
112 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Chrysler Voyager SE 2.4 Aut. · 152 CV (2004-2005)
Descripción general
El Chrysler Voyager no es solo un monovolumen, es el icono que definió una categoría. Este modelo de 2004 encarna el espíritu del viaje en familia, una promesa de espacio, comodidad y aventuras compartidas en la carretera. Es un vehículo que evoca recuerdos y crea futuros, un verdadero hogar sobre ruedas diseñado para unir a los que más quieres.
Experiencia de conducción
Ponerse al volante del Voyager es una invitación a la calma. Su motor de 2.4 litros y 152 caballos, acoplado a una suave transmisión automática, no busca récords de velocidad, sino ofrecer un viaje sereno y sin sobresaltos. Se siente grande, estable y seguro, meciéndote sobre el asfalto como un crucero americano. Es la máquina perfecta para devorar kilómetros sin prisa, donde el destino es tan importante como el placer de un trayecto tranquilo y confortable, aunque su consumo nos recuerde su generoso tamaño.
Diseño y estética
Su diseño es una declaración de intenciones: la función por encima de la forma, el espacio como lujo supremo. Con sus líneas cuadradas y su imponente presencia, el Voyager maximiza cada centímetro para el bienestar de sus ocupantes. Las puertas correderas son un gesto de genialidad práctica que cualquier padre agradece. Por dentro, es una caverna de posibilidades, con siete plazas reales y un maletero gigantesco que parece no tener fin. Es un diseño honesto, pensado para la vida real.
Tecnología y características
La tecnología del Voyager 2004 es la de la simplicidad y la robustez. No encontrarás pantallas táctiles ni asistentes complejos, sino una mecánica probada y fiable. Su mayor avance tecnológico es la comodidad que proporciona su cambio automático con convertidor de par y un equipamiento centrado en el confort de los pasajeros. Es un coche de una era donde la conexión era entre personas, no con dispositivos, y su tecnología refleja esa filosofía.
Competencia
En un mercado dominado por propuestas europeas como el Renault Espace o el Volkswagen Sharan, el Chrysler Voyager jugaba en su propia liga. Ofrecía un enfoque diferente, más americano, basado en el tamaño y la comodidad sin complejos. Mientras sus rivales buscaban un comportamiento más dinámico, el Voyager se enorgullecía de ser el rey del espacio y el confort en largos trayectos, un trozo del sueño americano en las carreteras europeas.
Conclusión
El Chrysler Voyager SE 2.4 es más que un coche; es una cápsula del tiempo que nos recuerda la importancia de viajar juntos. Es un vehículo imperfecto para el conductor apresurado, pero perfecto para la familia que valora el espacio y la serenidad. Su legado no está en su eficiencia o su tecnología, sino en los kilómetros de risas, conversaciones y paisajes compartidos que ha hecho posibles. Una elección nostálgica y profundamente humana.




