Especificaciones y análisis del Citroën C4
Potencia
120CV
Par
160Nm
Consumo
6.7l/100
Emisiones
159g/km
0-100 km/h
10s
Vel. Máx.
195km/h
Peso
1292kg
Precio
16,310€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 3 puertas
314 L
60 L
88 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Citroën C4 Coupé Millenium VTi 120 · 120 CV (2009-2010)
Descripción general
El Citroën C4 Coupé de 2008 no era simplemente un coche; era una declaración de intenciones. En un mundo de compactos a menudo predecibles, Citroën se atrevió a romper el molde con una silueta que parecía esculpida por el viento y el futurismo. Este modelo, en su versión Millenium VTi 120, representaba el equilibrio perfecto entre un diseño que te robaba el aliento y un motor voluntarioso pensado para disfrutar del viaje.
Experiencia de conducción
Ponerse al volante del C4 Coupé es una experiencia que apela a la calma y al placer de conducir. Su motor atmosférico de 120 CV te entrega la potencia de forma lineal y suave, invitándote a estirar las marchas de su cambio manual de cinco velocidades. No es un deportivo radical, pero sus 10 segundos para alcanzar los 100 km/h son más que suficientes para sentir agilidad. La suspensión, fiel a la tradición de Citroën, prioriza un confort de marcha excepcional, filtrando las imperfecciones del asfalto y convirtiendo cada trayecto en un paseo sereno y placentero.
Diseño y estética
Aquí es donde el C4 Coupé se convierte en arte. Su carrocería de tres puertas, con esa caída de techo dramática y la icónica luneta trasera partida, es un imán para las miradas. Es una escultura rodante que, incluso hoy, se siente moderna y audaz. Por dentro, la magia continúa con su volante de centro fijo, una solución tan ingeniosa como peculiar, y la instrumentación digital central que te sumerge en una cabina diferente a todo lo demás. Es un coche que te hace sentir especial cada vez que abres la puerta.
Tecnología y características
Adelantado a su tiempo en concepto, el C4 Coupé integraba la tecnología de una forma muy personal. El protagonismo se lo llevaba su puesto de conducción, con la pantalla translúcida central que mostraba la información de forma clara y el volante multifunción fijo, que mantenía los controles siempre en la misma posición. Aunque no contaba con las pantallas táctiles o la conectividad de hoy, ofrecía elementos de confort como el climatizador o el control de crucero, todo envuelto en una atmósfera de innovación que definía la experiencia a bordo.
Competencia
En su época, el C4 Coupé se enfrentó a rivales de gran calibre como el Volkswagen Scirocco, el Opel Astra GTC o el Renault Mégane Coupé. Mientras que algunos de sus competidores apostaban por una deportividad más pura y un tacto más firme, el Citroën jugaba en su propia liga. Era la elección para quien valoraba la originalidad estética y un confort de marcha superior por encima de las prestaciones puras, ofreciendo una personalidad única que lo desmarcaba del resto.
Conclusión
El Citroën C4 Coupé VTi 120 es mucho más que un simple medio de transporte; es una pieza de diseño con la que se establece un vínculo emocional. Es un coche para quienes aprecian la belleza en lo diferente y buscan una experiencia de conducción cómoda y distintiva. A día de hoy, sigue siendo una opción fantástica para quien quiera un coche con un alma inconfundible, un futuro clásico que te recordará que conducir también puede ser un acto de expresión personal.