Citroën C5 HDi 110cv FAP SX (2004-2005)

2005
Gasóleo
FWD
Manual 5v
Citroën C5 - Vista 1
Citroën C5 - Vista 2
Citroën C5 - Vista 3
Citroën C5 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Citroën C5

Potencia

109CV

Par

240Nm

Consumo

5.4l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

11.3s

Vel. Máx.

190km/h

Peso

1424kg

Precio

20,030

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Manual 5v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

471 L

Depósito

66 L

Potencia

80 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima109 CV / 80 kW
Par máximo240 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito66 L
Maletero471 L

Análisis detallado del Citroën C5 HDi 110cv FAP SX (2004-2005)

Descripción general

El Citroën C5 de 2005 no es solo una berlina, es una declaración de principios. En un mundo que empezaba a obsesionarse con la rigidez alemana, este coche representaba el culmen del confort a la francesa, una invitación a viajar sin prisas, envuelto en una burbuja de serenidad y elegancia.

Experiencia de conducción

Conducir este C5 es una experiencia casi mágica. La suspensión hidroneumática te hace sentir que flotas sobre el asfalto, borrando las imperfecciones de la carretera con una suavidad que ningún rival podía igualar. El motor HDi de 109 CV, aunque modesto, empuja con solvencia y un consumo ridículo, convirtiendo cada viaje en un placer relajado. No busques deportividad, busca un bienestar inigualable.

Diseño y estética

Su diseño, renovado en esta fase, le otorgó una mirada más afilada y personal con sus faros en forma de bumerán y una zaga más imponente. Por dentro, el espacio es generoso y los asientos son auténticos butacones pensados para devorar kilómetros sin fatiga. Es un diseño que prioriza la función y el bienestar de sus ocupantes por encima de modas pasajeras.

Tecnología y características

La joya de la corona era, sin duda, la suspensión Hydractive 3, una maravilla tecnológica que adaptaba la altura y dureza del coche a las condiciones de la vía. Más allá de eso, ofrecía elementos avanzados para su época como el climatizador, control de crucero y un completo ordenador de a bordo, demostrando que el confort también podía ser inteligente.

Competencia

En su camino se encontró con pesos pesados del segmento como el Ford Mondeo, el Volkswagen Passat o sus compatriotas, el Renault Laguna y el Peugeot 407. Frente a ellos, el C5 no competía en deportividad, sino que jugaba su propia liga: la del confort absoluto y la personalidad arrolladora.

Conclusión

El Citroën C5 HDi 110cv es más que un coche de segunda mano; es una experiencia de conducción que ya no se fabrica. Es la elección perfecta para quien valora el confort por encima de todo y busca un compañero de viaje fiel, económico y con un carácter único. Un coche que te cuida y te recuerda que el destino es tan importante como el propio viaje.