Especificaciones y análisis del Citroën C5
Potencia
170CV
Par
370Nm
Consumo
7.3l/100
Emisiones
194g/km
0-100 km/h
9.5s
Vel. Máx.
222km/h
Peso
1683kg
Precio
30,347€
Resumen técnico
Gasóleo
Automático 6v
FWD
5 / 5 puertas
471 L
66 L
125 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Citroën C5 2.2 HDi 173 FAP Exclusive CAS · 170 CV (2007)
Descripción general
El Citroën C5 2.2 HDi de 2007 representa la culminación de una era para las berlinas francesas, un vehículo que priorizaba el confort absoluto y la potencia rutera por encima de todo. Con su motor diésel de 170 caballos y el acabado Exclusive, se posicionaba como una opción sofisticada y tecnológica para devorar kilómetros con una serenidad inigualable, encarnando el espíritu viajero de la marca.
Experiencia de conducción
Conducir este C5 es una experiencia que te aísla del mundo exterior. La suspensión hidroneumática Hydractive 3+ convierte el asfalto en una alfombra voladora, absorbiendo las irregularidades con una suavidad que ningún rival de la época podía igualar. El motor 2.2 HDi empuja con contundencia desde bajas vueltas gracias a sus 370 Nm de par, ofreciendo una respuesta solvente y progresiva, ideal para largos viajes por autopista. No es un coche de sensaciones deportivas, sino una máquina de bienestar que te invita a disfrutar del trayecto sin prisas y con un silencio de marcha excepcional.
Diseño y estética
Su diseño exterior es inconfundiblemente Citroën, con una silueta de berlina clásica pero con detalles únicos como su característica luneta trasera cóncava. Transmite una sensación de robustez y elegancia discreta. Por dentro, el espacio es generoso y los asientos son auténticos butacones pensados para el máximo confort. El salpicadero, aunque hoy se percibe algo anticuado, ofrecía una buena ergonomía y materiales de calidad que creaban una atmósfera acogedora y bien rematada.
Tecnología y características
La joya de la corona tecnológica es, sin duda, su suspensión hidroneumática, capaz de variar la altura y la dureza de forma automática. Este sistema no solo proporcionaba un confort sublime, sino también una estabilidad imperturbable a alta velocidad. Además, el motor 2.2 HDi con doble turbo era una pieza de ingeniería avanzada para su tiempo, y el acabado Exclusive incluía elementos como faros de xenón, climatizador bizona y un completo sistema de audio, situándolo a la vanguardia de su segmento.
Competencia
En su momento, luchaba en un segmento muy competido contra berlinas consolidadas como el Ford Mondeo, el Volkswagen Passat o el Peugeot 407. Mientras que el Passat ofrecía sobriedad alemana y el Mondeo un chasis más dinámico, el C5 jugaba una carta única e intransferible: la del confort supremo. Ninguno de sus competidores podía ofrecer esa sensación de flotar sobre la carretera, lo que le otorgaba una personalidad muy marcada y un público fiel.
Conclusión
El Citroën C5 2.2 HDi Exclusive es más que una simple berlina; es una declaración de principios. Es un coche para quienes entienden que el verdadero lujo en la carretera es el confort y la tranquilidad. Su potente motor diésel y su legendaria suspensión lo convierten en un compañero de viaje infatigable y profundamente placentero. Aunque su complejidad mecánica puede asustar, la recompensa es una experiencia de conducción única que evoca la mejor tradición de Citroën.