Especificaciones y análisis del Citroën C5
Potencia
136CV
Par
190Nm
Consumo
8.4l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
10s
Vel. Máx.
203km/h
Peso
1367kg
Precio
19,820€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
563 L
66 L
100 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Citroën C5 Break 2.0i 16v SX · 136 CV (2001-2004)
Descripción general
El Citroën C5 Break de primera generación no es solo un coche familiar; es una declaración de principios. Lanzado en 2001, representó la culminación de décadas de innovación de la marca en confort y funcionalidad, ofreciendo un refugio rodante para la familia que priorizaba el bienestar por encima de todo.
Experiencia de conducción
Conducir este C5 es una experiencia casi mágica. Sus 136 caballos mueven el conjunto con soltura, pero la verdadera protagonista es la suspensión Hidractiva. La sensación es la de flotar sobre el asfalto, absorbiendo cada imperfección con una suavidad que ningún rival de su época podía igualar. No es un deportivo, es una alfombra voladora que te invita a devorar kilómetros sin fatiga, disfrutando de un silencio y una calma que envuelven el habitáculo.
Diseño y estética
Su diseño es funcional y elegante, con una silueta alargada y fluida que maximiza el espacio interior. No busca la agresividad, sino la armonía. Por dentro, el espacio es monumental. El salpicadero, con su instrumentación clara, y los asientos, auténticos butacones, te acogen en un ambiente pensado para el confort. El maletero de 563 litros es una caverna capaz de engullir todo el equipaje de una familia sin esfuerzo.
Tecnología y características
La joya de la corona tecnológica es, sin duda, su suspensión hidroneumática, que permite variar la altura de la carrocería y mantenerla constante independientemente de la carga. Más allá de esta proeza de ingeniería, el acabado SX venía bien equipado para su tiempo, con elementos de seguridad como los frenos de disco en las cuatro ruedas y un enfoque claro en la comodidad a bordo.
Competencia
En su lanzamiento, se enfrentó a pesos pesados del segmento familiar como el Ford Mondeo Sportbreak, el Volkswagen Passat Variant o el Renault Laguna Grand Tour. Mientras sus competidores apostaban por un tacto más firme, el C5 jugaba en su propia liga, la del confort absoluto, siendo una alternativa única para quien buscaba algo diferente.
Conclusión
El Citroën C5 Break 2.0i es mucho más que un coche práctico; es una experiencia de viaje. Es la elección perfecta para quienes entienden que el lujo no está en la velocidad, sino en la serenidad. Un clásico moderno que encarna el espíritu más puro de Citroën, ofreciendo un nivel de comodidad y versatilidad que sigue sorprendiendo a día de hoy.




