Especificaciones y análisis del Citroën C5
Potencia
133CV
Par
317Nm
Consumo
7.1l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
11.3s
Vel. Máx.
198km/h
Peso
1558kg
Precio
28,125€
Resumen técnico
Gasóleo
Automático 4v
FWD
5 / 5 puertas
563 L
66 L
98 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Citroën C5 Break 2.2 HDi 136cv Exclusive C.A.S. (2001-2004)
Descripción general
El Citroën C5 Break de primera generación es mucho más que un simple coche familiar; es la encarnación del confort y la versatilidad al estilo francés. Lanzado a principios de los 2000, este modelo con su motor 2.2 HDi de 133 caballos y cambio automático se postuló como el compañero de viaje ideal, prometiendo devorar kilómetros sin que el cansancio hiciera mella en sus ocupantes.
Experiencia de conducción
Conducir este C5 Break es como flotar sobre una alfombra mágica. La sensación de aislamiento y suavidad que proporciona su suspensión hidroneumática es simplemente sublime, absorbiendo las imperfecciones del asfalto con una maestría que pocos coches pueden igualar. El empuje del motor diésel es generoso y constante desde bajas vueltas, y junto a la transmisión automática, crea una experiencia de conducción serena y poderosa, perfecta para largos trayectos donde el estrés no tiene cabida.
Diseño y estética
Su diseño exterior es una declaración de intenciones: funcional, elegante y sin estridencias. La silueta alargada de la carrocería familiar no solo maximiza el espacio, con un maletero cavernoso de 563 litros, sino que también le confiere una presencia aplomada en la carretera. Por dentro, el habitáculo es un santuario de comodidad, con asientos amplios y un enfoque claro en la ergonomía y el bienestar de los pasajeros.
Tecnología y características
La joya de la corona tecnológica es, sin duda, su sofisticada suspensión hidroneumática, capaz de variar la altura y la firmeza para adaptarse a la carretera y la carga. El motor 2.2 HDi, con inyección directa por conducto común y turbo de geometría variable, representaba la vanguardia diésel de la época, ofreciendo un equilibrio notable entre prestaciones y un consumo ajustado de 7.1 litros a los cien.
Competencia
En su época, el C5 Break se enfrentó a una dura competencia en el segmento de las berlinas familiares. Rivales como el Ford Mondeo Sportbreak, el Volkswagen Passat Variant o su primo, el Peugeot 407 SW, ofrecían propuestas muy competentes, pero ninguno podía replicar la experiencia de confort única que brindaba la suspensión del Citroën.
Conclusión
El Citroën C5 Break 2.2 HDi es un coche con una personalidad arrolladora, definido por un confort de marcha excepcional y una practicidad a toda prueba. No busca ser el más rápido ni el más ágil, sino el más cómodo y relajante. Es una oda a los grandes viajes en familia, un refugio rodante que demostró que el lujo no siempre está en la opulencia, sino en el bienestar.




