Citroën C5 Break HDi 110 FAP Audace · 109 CV (2007-2008)

2005
Gasóleo
FWD
Manual 5v

Especificaciones y análisis del Citroën C5

Potencia

109CV

Par

240Nm

Consumo

5.5l/100

Emisiones

142g/km

0-100 km/h

11.5s

Vel. Máx.

186km/h

Peso

1517kg

Precio

21,440

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Manual 5v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

563 L

Depósito

66 L

Potencia

80 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima109 CV / 80 kW
Par máximo240 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito66 L
Maletero563 L

Análisis detallado del Citroën C5 Break HDi 110 FAP Audace · 109 CV (2007-2008)

Descripción general

El Citroën C5 Break de 2007 se presenta como la quintaesencia del coche familiar según la visión de la marca francesa: un vehículo donde el confort supremo y el espacio son los protagonistas absolutos. Esta versión, equipada con el eficiente motor HDi de 109 caballos, fue concebida para devorar kilómetros en autopista con una suavidad y una capacidad de carga que emocionan a quienes valoran los viajes largos y serenos por encima de la deportividad.

Experiencia de conducción

Ponerse al volante del C5 Break es sumergirse en una burbuja de tranquilidad. La sensación de flotar sobre el asfalto, gracias a su legendaria suspensión, es una experiencia casi mágica que aísla del mundo exterior. El motor HDi de 109 CV, con su generoso par de 240 Nm a bajas vueltas, mueve el conjunto con una soltura digna y sin esfuerzo, invitando a una conducción relajada y fluida. No es un coche de aceleraciones fulgurantes, sino un compañero fiel que te lleva a tu destino con una calma y un aplomo que enamoran, haciendo que cada viaje se sienta más corto y placentero.

Diseño y estética

El diseño del C5 Break es una oda a la funcionalidad y la elegancia discreta. Sus líneas fluidas y alargadas culminan en una zaga imponente, diseñada para albergar un maletero colosal de 563 litros. No busca miradas de asombro, sino transmitir una sensación de robustez y capacidad. El frontal, con los chevrones integrados en la calandra, le otorga una identidad inconfundiblemente Citroën. Por dentro, el espacio es el verdadero lujo, con un habitáculo pensado para que cinco ocupantes viajen con una comodidad excepcional, rodeados de materiales pensados para durar y agradar al tacto.

Tecnología y características

La mayor proeza tecnológica de este C5 reside en su chasis y, en particular, en su sistema de suspensión, capaz de ofrecer un confort de marcha inigualable en su segmento. El motor 1.6 HDi con filtro de partículas (FAP) representaba una mecánica diésel moderna y eficiente para su época, logrando consumos muy contenidos de 5.5 l/100km. Aunque no disponía de las ayudas a la conducción actuales, su equipamiento de confort y seguridad cumplía con creces las expectativas de una berlina familiar de su tiempo, centrándose en lo esencial para garantizar viajes seguros y placenteros.

Competencia

En un mercado muy competido, el Citroën C5 Break se enfrentó a titanes como el Ford Mondeo Sportbreak, elogiado por su dinamismo, o el Volkswagen Passat Variant, referente en calidad y equilibrio. También luchó contra sus compatriotas, el Peugeot 407 SW de diseño más atrevido y el Renault Laguna Grand Tour. Frente a todos ellos, el C5 jugó una carta única e imbatible: la de ofrecer un nivel de confort y una calidad de rodadura que ninguno de sus rivales podía igualar, convirtiéndose en el refugio rodante para las familias más viajeras.

Conclusión

El Citroën C5 Break HDi 110 es mucho más que un simple coche familiar; es una declaración de intenciones. Es la elección del corazón para quien prioriza el bienestar de los suyos y la serenidad en cada desplazamiento. Su modesto rendimiento queda eclipsado por su enorme practicidad, su consumo frugal y, sobre todo, por esa sensación única de viajar en una alfombra voladora. Un vehículo profundamente honesto y satisfactorio que deja una huella imborrable en la memoria de quienes lo conducen.