Especificaciones y análisis del Citroën C6
Potencia
170CV
Par
400Nm
Consumo
7.6l/100
Emisiones
199g/km
0-100 km/h
11.2s
Vel. Máx.
214km/h
Peso
1923kg
Precio
38,058€
Resumen técnico
Gasóleo
Automático 6v
FWD
5 / 4 puertas
421 L
72 L
125 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Citroën C6 170 HDi FAP CAS Business · 170 CV (2009-2010)
Descripción general
El Citroën C6 no es solo un coche; es la última gran berlina de representación francesa, un canto de cisne a una era de audacia y vanguardia. Heredero de mitos como el DS y el CX, llegó en 2006 para desafiar el status quo alemán con una propuesta radicalmente diferente, donde el lujo se mide en confort y originalidad.
Experiencia de conducción
Conducir un C6 es como deslizarse sobre una alfombra mágica. La suspensión hidroneumática Hydractive 3+ te aísla del mundo exterior, filtrando cada imperfección del asfalto con una suavidad que ningún otro coche de su época podía igualar. No busca la deportividad, sino la serenidad absoluta. El motor diésel de 170 CV empuja con suficiencia y silencio, invitando a devorar kilómetros sin sentir el más mínimo atisbo de fatiga, en un habitáculo que es un santuario de paz.
Diseño y estética
Su diseño es una declaración de intenciones, una obra de arte que amas u odias, pero que jamás te deja indiferente. La silueta alargada, la luneta trasera cóncava como un guiño al CX, las puertas sin marco y su aerodinámica afilada crean una presencia imponente y futurista. Cada línea y cada detalle, desde los faros hasta el alerón retráctil, fueron pensados para romper moldes y perdurar en el tiempo como un icono de estilo.
Tecnología y características
Más allá de su estética, el C6 era un escaparate tecnológico. El corazón del coche era su sofisticada suspensión activa, pero también fue pionero en incorporar elementos como el Head-Up Display a color, que proyectaba información en el parabrisas, o el sistema de alerta de cambio involuntario de carril. Todo estaba enfocado en crear una experiencia de viaje segura, relajada y de primera clase.
Competencia
En un mercado dominado por la sobriedad y la deportividad de los Audi A6, BMW Serie 5 y Mercedes-Benz Clase E, el Citroën C6 se erigió como la alternativa para el inconformista. No competía en tiempos por vuelta, sino en pulsaciones por minuto. Ofrecía un concepto de lujo distinto, basado en el bienestar, el diseño atrevido y una herencia automovilística única que sus rivales alemanes simplemente no podían replicar.
Conclusión
El Citroën C6 es una experiencia, una pieza de coleccionista desde el día que salió del concesionario. Es un coche para entendidos, para quienes aprecian la historia y valoran el confort supremo por encima de todo. No es la elección lógica, es la elección del corazón. Un automóvil valiente y especial que representa la última vez que una marca generalista se atrevió a soñar tan alto.