Especificaciones y análisis del Citroën C8
Potencia
136CV
Par
320Nm
Consumo
7.1l/100
Emisiones
188g/km
0-100 km/h
11.4s
Vel. Máx.
190km/h
Peso
1818kg
Precio
33,060€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
5 / 5 puertas
225 L
80 L
100 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Citroën C8 2.0 HDi 138 FAP Premier II · 136 CV (2008)
Descripción general
El Citroën C8 es la encarnación del viaje en familia, un monovolumen concebido para devorar kilómetros con un confort y una amplitud excepcionales. Nacido de una colaboración europea, este vehículo no busca impresionar con deportividad, sino conquistar corazones con su inmenso espacio interior y su enfoque práctico, convirtiendo cada desplazamiento en una experiencia compartida y memorable.
Experiencia de conducción
Al volante, el C8 transmite una sensación de dominio y tranquilidad. Su motor 2.0 HDi de 136 caballos, con un generoso par de 320 Nm desde bajas vueltas, mueve sus más de 1800 kilos con una soltura sorprendente, sin brusquedad. No es un vehículo para buscar emociones fuertes en curvas, sino para disfrutar de una conducción suave y estable en autopista, donde su suspensión filtra las irregularidades y el habitáculo permanece en un silencio placentero. Es el compañero ideal para largas travesías, un crucero familiar que invita a la calma.
Diseño y estética
El diseño del Citroën C8 es una oda a la funcionalidad. Sus formas redondeadas y su gran superficie acristalada no solo le dan una apariencia amable, sino que maximizan la luz y el espacio interior. Las puertas traseras correderas son una bendición en el día a día, facilitando el acceso en aparcamientos estrechos y la colocación de los niños. Por dentro, su modularidad es su mayor virtud, con asientos individuales que se pueden mover o extraer para adaptar el espacio a cualquier necesidad, todo ello presidido por una instrumentación central que fue seña de identidad y modernidad en su época.
Tecnología y características
Para su tiempo, el C8 ofrecía una dotación tecnológica centrada en la seguridad y el confort. Contaba con elementos como el control de estabilidad, múltiples airbags y un climatizador eficaz para un habitáculo tan grande. El motor diésel con filtro de partículas (FAP) representaba un esfuerzo por reducir las emisiones, mientras que su ordenador de a bordo proporcionaba información útil para el viaje. Aunque hoy sus sistemas puedan parecer sencillos, en 2008 cumplían con creces la misión de hacer la vida a bordo más fácil y segura.
Competencia
El C8 no estaba solo en el segmento de los grandes monovolúmenes. Sus rivales más directos eran sus propios hermanos de proyecto: el Peugeot 807, el Fiat Ulysse y el Lancia Phedra, con los que compartía plataforma. Más allá de su familia, se enfrentaba a pesos pesados como la Renault Espace, la Ford Galaxy o la Volkswagen Sharan, cada una con sus propios argumentos pero todas compitiendo por ser el vehículo familiar definitivo.
Conclusión
El Citroën C8 2.0 HDi es más que un coche; es un hogar sobre ruedas. Un vehículo honesto y extraordinariamente capaz que prioriza el bienestar de sus ocupantes por encima de todo. Su motor diésel es un aliado fiable y económico para los grandes viajeros, y su interior es un lienzo en blanco para las necesidades de cada familia. Quizás no acelere el pulso, pero sin duda calienta el corazón con los recuerdos que ayuda a construir en cada viaje. Una elección lógica y emocional para quienes entienden que el verdadero lujo es el espacio y el tiempo compartido.