Especificaciones y análisis del Citroën C8
Potencia
170CV
Par
370Nm
Consumo
7.2l/100
Emisiones
191g/km
0-100 km/h
10s
Vel. Máx.
200km/h
Peso
1902kg
Precio
32,659€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
6 / 5 puertas
830 L
80 L
125 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Citroën C8 2.2 HDi 173 FAP Exclusive Captain Chairs · 170 CV (2008-2009)
Descripción general
El Citroën C8 2.2 HDi 173 FAP Exclusive Captain Chairs es mucho más que un monovolumen; es un salón rodante concebido para devorar kilómetros en familia. Representa una época en la que el espacio y el confort de viaje eran el máximo lujo, encapsulando la promesa de aventuras sin fin y recuerdos compartidos en cada uno de sus generosos asientos.
Experiencia de conducción
Al volante, la sensación es de dominio y serenidad. El potente motor diésel de 170 CV empuja con una fuerza tranquila y contundente desde bajas revoluciones, haciendo que los adelantamientos y las subidas parezcan un mero trámite, incluso a plena carga. Su suspensión, afinada para el confort, filtra las imperfecciones del asfalto con una suavidad que te aísla del mundo exterior, convirtiendo cada viaje en una experiencia relajante y placentera. No busca la deportividad, sino ofrecer un santuario de paz en movimiento.
Diseño y estética
Su diseño exterior es una oda a la funcionalidad, con formas que buscan maximizar el espacio interior por encima de todo. Las enormes puertas correderas eléctricas son un golpe de genialidad, una bendición para padres con niños en aparcamientos estrechos. Por dentro, la configuración 'Captain Chairs' de esta versión Exclusive eleva la experiencia, ofreciendo butacas individuales que miman a los pasajeros. La luminosidad inunda el habitáculo gracias a sus grandes superficies acristaladas, creando una atmósfera diáfana y acogedora.
Tecnología y características
Para su época, el C8 venía cargado de tecnología pensada para el confort. Elementos como el climatizador multizona, el control de crucero o los sensores de aparcamiento facilitaban la vida a bordo. Su característico cuadro de instrumentos central, aunque peculiar, buscaba democratizar la información del viaje para todos los ocupantes. El filtro de partículas (FAP) era una pieza clave en su mecánica diésel para cumplir con las normativas y reducir su impacto ambiental.
Competencia
Nacido de una colaboración, sus hermanos casi gemelos eran el Peugeot 807, el Fiat Ulysse y el Lancia Phedra. Más allá de su familia, se enfrentaba a gigantes como el Renault Espace, el pionero del segmento; el dúo Ford Galaxy y S-MAX, que ofrecían un tacto de conducción más dinámico; y los sólidos Volkswagen Sharan y SEAT Alhambra, referentes en calidad y versatilidad. El C8 se distinguía por su enfoque absoluto en el confort de marcha.
Conclusión
El Citroën C8 es un vehículo con un propósito claro y un corazón enorme. Es la elección perfecta para quienes valoran el viaje tanto como el destino. Su combinación de un motor potente y solvente, un espacio interior cavernoso y un confort de marcha excepcional lo convierten en un compañero de aventuras inolvidable. Aunque el tiempo ha pasado, su alma de gran viajero sigue intacta, evocando una nostalgia por la carretera y los momentos en familia.




