Especificaciones y análisis del Corvette C6
Potencia
442CV
Par
585Nm
Consumo
-l/100
Emisiones
316g/km
0-100 km/h
4.4s
Vel. Máx.
306km/h
Peso
1583kg
Precio
88,350€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 6v
RWD
2 / 2 puertas
295 L
68 L
325 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Corvette C6 Convertible 6.2 V8 · 442 CV (2008-2009)
Descripción general
El Corvette C6 Convertible de 2008 es la encarnación del sueño americano sobre ruedas. Un deportivo que no pide permiso, que ruge con la fuerza de su V8 de 6.2 litros y te invita a sentir la libertad a cielo abierto. Es más que un coche; es una declaración de principios, una pieza de historia automotriz que palpita con potencia y pasión.
Experiencia de conducción
Ponerse al volante es un torrente de emociones puras. El empuje de sus 442 caballos te pega al asiento mientras la sinfonía del V8 inunda tus oídos. Cada cambio de la transmisión manual de seis velocidades es un acto deliberado y mecánico, conectándote directamente con la carretera. La tracción trasera te exige respeto y te recompensa con una agilidad brutal, capaz de catapultarte de 0 a 100 km/h en solo 4.4 segundos. Conducirlo descapotado es una experiencia visceral, una sobredosis de velocidad, sonido y viento.
Diseño y estética
Su silueta es inconfundible y atemporal. Un capó larguísimo que esconde la bestia, una zaga corta y musculosa, y unas líneas fluidas que gritan velocidad incluso en parado. El C6 Convertible es una escultura en movimiento, un diseño agresivo y elegante a la vez, que ha envejecido con una dignidad increíble y sigue girando cabezas allá por donde pasa. Es la perfecta combinación de herencia y modernidad de su época.
Tecnología y características
Aquí la tecnología está al servicio de la performance, no de las distracciones. El corazón es su motor LS3, una obra de ingeniería con bloque y culata de aluminio. El chasis se apoya en suspensiones de paralelogramo deformable y unos frenos de disco ventilados de gran tamaño para detener con contundencia sus 1583 kg. No encontrarás pantallas gigantes, pero sí una ingeniería enfocada en una única cosa: ofrecer una experiencia de conducción deportiva y auténtica.
Competencia
En su día, se enfrentó a titanes europeos como el Porsche 911 Carrera Cabriolet o el BMW M6 Convertible. Mientras sus rivales ofrecían más refinamiento y lujo interior, el Corvette C6 contraatacaba con una fórmula irresistible: una potencia descomunal, un carácter indomable y una relación precio-prestaciones que los dejaba sin argumentos. Era la alternativa salvaje, el músculo americano frente a la precisión teutona.
Conclusión
El Corvette C6 Convertible no es un coche para cualquiera. Es una máquina para puristas, para quienes buscan sentir la carretera, el motor y el viento sin filtros. Representa una era del automovilismo donde la emoción cruda prevalecía sobre la asistencia digital. Es un icono que ofrece una experiencia de conducción inolvidable, un clásico moderno cuyo valor emocional y sonoro es incalculable.




