Especificaciones y análisis del Dodge Caliber
Potencia
150CV
Par
168Nm
Consumo
7.3l/100
Emisiones
174g/km
0-100 km/h
12.8s
Vel. Máx.
170km/h
Peso
1395kg
Precio
15,620€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
352 L
51 L
110 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Dodge Caliber S 1.8 · 150 CV (2008-2009)
Descripción general
El Dodge Caliber irrumpió en el mercado europeo como un soplo de aire fresco y rudo directamente desde América. No era un compacto más; era una declaración de intenciones, una fusión audaz entre un hatchback y un SUV que te hacía sentir al volante de algo único y poderoso, un coche con una personalidad arrolladora que no dejaba a nadie indiferente.
Experiencia de conducción
Conducir el Caliber es una experiencia visceral. Sus 150 caballos prometen energía, pero su entrega es más tranquila y progresiva que explosiva. El motor atmosférico de 1.8 litros, acoplado a una caja manual de cinco marchas, te conecta con la mecánica de una forma hoy casi olvidada. No busques una agilidad felina; su alma es la de un crucero robusto, estable en carretera pero que se toma con calma las aceleraciones. Es la sensación de dominar una máquina sólida que te aísla del asfalto con su particular carácter.
Diseño y estética
Su diseño es su mayor carta de presentación y el origen de todas las pasiones que despierta. Líneas musculosas, una parrilla imponente con la cruz de Dodge y unos pasos de rueda marcados le confieren una estampa de todoterreno en miniatura. Es un coche que grita 'aquí estoy yo'. Sin embargo, esa audacia exterior contrasta con un interior funcional pero dominado por plásticos duros, un espacio donde la practicidad y la sencillez ganaron la batalla al lujo.
Tecnología y características
El Caliber es un coche de su tiempo, una oda a la simplicidad mecánica. No esperes pantallas táctiles ni asistentes de conducción avanzados. Su tecnología se centra en lo esencial: un motor fiable de inyección indirecta, frenos de disco eficientes y una estructura pensada para la robustez. Es un vehículo que te devuelve a una era donde la conexión entre el conductor y la máquina era directa, sin filtros electrónicos que diluyeran la experiencia.
Competencia
En un mercado dominado por los refinados compactos europeos como el Volkswagen Golf o el Ford Focus, el Caliber jugaba en su propia liga. Su verdadero rival conceptual fue el Nissan Qashqai, que también exploraba el territorio crossover. Sin embargo, el Dodge ofrecía un sabor inconfundiblemente americano, una alternativa para quien buscaba diferenciarse con una estética más agresiva y una actitud desafiante.
Conclusión
El Dodge Caliber no es un coche que se elige con la cabeza, sino con el corazón. Es una compra emocional para aquellos que valoran la estética imponente y la sensación de conducir algo diferente por encima del rendimiento puro o los acabados premium. Fue un valiente intento de conquistar Europa con el espíritu de Detroit, dejando una huella imborrable como un coche con un carácter único, imperfecto y, precisamente por eso, inolvidable.