Especificaciones y análisis del Dodge Journey
Potencia
140CV
Par
310Nm
Consumo
6.3l/100
Emisiones
165g/km
0-100 km/h
11.6s
Vel. Máx.
190km/h
Peso
1895kg
Precio
32,246€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
7 / 5 puertas
758 L
78 L
103 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Dodge Journey 2.0 CRD SXT 7 plazas · 140 CV (2008-2010)
Descripción general
El Dodge Journey irrumpió en 2008 como un soplo de aire fresco y robustez americana en el mercado europeo. Concebido como un crossover que fusiona el alma de un monovolumen con la imponente estampa de un SUV, este vehículo prometía espacio, versatilidad y un carácter inconfundible para las familias que soñaban con la aventura en cada desplazamiento, gracias a su generosa configuración de siete plazas.
Experiencia de conducción
Al volante, el Journey se siente como un compañero de viaje leal y confortable. Su corazón diésel de 2.0 litros y 140 caballos, de origen Volkswagen, ofrece una respuesta solvente y familiar, con un par motor de 310 Nm que empuja con decisión desde bajas vueltas, ideal para viajar cargado. No busca la deportividad, con una aceleración de 11.6 segundos, sino el aplomo y la serenidad en largos trayectos. La suspensión filtra las irregularidades con suavidad, invitando a devorar kilómetros sin fatiga, mientras que su enorme depósito de 78 litros garantiza una autonomía excepcional, haciendo honor a su nombre.
Diseño y estética
Visualmente, el Journey es puro músculo americano. Su diseño es una declaración de intenciones, con una calandra prominente, líneas rectas y una presencia que no pasa desapercibida. Sus casi 4.9 metros de longitud se traducen en un interior cavernoso y modular, pensado para la vida familiar. Abundan los huecos portaobjetos inteligentes y la practicidad reina sobre el lujo, con un maletero gigantesco de 758 litros en configuración de cinco plazas. Es un coche que prioriza la función y el espacio con una honestidad admirable.
Tecnología y características
En su contexto de 2008, el Journey ofrecía una dotación tecnológica correcta y funcional. El equipamiento se centraba en el confort y la seguridad esencial de la época, sin los avanzados asistentes de conducción actuales. Su mayor baza tecnológica residía bajo el capó, con un motor common-rail con turbo de geometría variable que representaba una solución moderna y eficiente para mover su considerable masa, logrando un consumo combinado de solo 6.3 litros a los cien kilómetros.
Competencia
El Dodge Journey se enfrentó a los grandes monovolúmenes europeos como el Ford S-Max, el Renault Espace o el Citroën C4 Grand Picasso. Sin embargo, su estética de crossover también lo posicionaba como una alternativa a los primeros SUV de siete plazas como el Hyundai Santa Fe o el Mitsubishi Outlander. Su principal argumento de venta era precisamente esa personalidad única, a medio camino entre dos mundos, que ofrecía una imagen más aventurera que la de un monovolumen tradicional.
Conclusión
El Dodge Journey 2.0 CRD es un vehículo con un alma sincera y un propósito claro: ser el mejor aliado para las grandes familias viajeras. Es la elección del corazón para quien valora el espacio sin límites, el confort en ruta y una estética diferenciadora por encima de las prestaciones puras o la última tecnología. Un coche que evoca la libertad de las carreteras abiertas y que cumple con creces su promesa de ser un refugio espacioso y fiable para la aventura cotidiana.