Especificaciones y análisis del Ford B-MAX
Potencia
125CV
Par
200Nm
Consumo
4.9l/100
Emisiones
114g/km
0-100 km/h
11.2s
Vel. Máx.
189km/h
Peso
1279kg
Precio
18,709€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
318 L
48 L
92 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Ford B-MAX Titanium 1.0 Ecoboost 125 CV Auto-Start-Stop (2013-2018)
Descripción general
El Ford B-MAX no es un monovolumen pequeño más; es una declaración de intenciones, una oda a la practicidad y a la vida familiar urbana. Nacido en 2012, este coche se atrevió a reimaginar el acceso al habitáculo con una solución tan audaz como brillante, convirtiendo cada trayecto en una experiencia de comodidad y facilidad sin precedentes. Es un vehículo que te conquista desde el primer momento en que abres sus puertas.
Experiencia de conducción
Al volante, el B-MAX sorprende y enamora. El pequeño motor 1.0 EcoBoost de 125 CV es un corazón lleno de vida que empuja con una energía inesperada, haciendo que la conducción en ciudad sea un juego de niños y permitiendo escapadas por carretera con total solvencia. Se siente ágil, ligero y conectado a la carretera, con esa puesta a punto de chasis tan característica de Ford que equilibra magistralmente el confort con un dinamismo que dibuja sonrisas. Es un coche que se disfruta conduciendo, no solo utilizando.
Diseño y estética
Su diseño es su alma. La ausencia del pilar B central, combinada con las puertas traseras correderas, crea un acceso lateral de 1,5 metros que transforma por completo la manera de interactuar con el coche. Subir una silla infantil, cargar objetos voluminosos o simplemente entrar y salir se convierte en un acto de una fluidez asombrosa. Estéticamente, sigue las líneas del 'Kinetic Design' de Ford, logrando una apariencia dinámica y moderna que ha envejecido con gracia, demostrando que la funcionalidad no está reñida con el estilo.
Tecnología y características
Para su época, el B-MAX ofrecía un equipamiento tecnológico muy completo. El sistema de conectividad SYNC permitía controlar funciones por voz, un lujo en su segmento. Además, incorporaba sistemas de seguridad activa como el 'Active City Stop', capaz de frenar el coche automáticamente a baja velocidad para evitar colisiones. Aunque su salpicadero lleno de botones puede parecer abrumador hoy en día, en su momento representaba un centro de control completo y funcional al alcance del conductor.
Competencia
En el competitivo segmento de los monovolúmenes pequeños, el B-MAX se enfrentó a rivales de peso. El Opel Meriva, con su propio sistema de puertas de apertura inversa, fue su competidor más directo en cuanto a innovación. Otros como el Citroën C3 Picasso, con su enfoque en la luminosidad y el espacio, o el Fiat 500L, con su carisma y diseño italiano, también lucharon por el favor de las familias jóvenes que buscaban un coche versátil y con personalidad.
Conclusión
El Ford B-MAX es una de esas joyas automovilísticas que, quizás, no recibió todo el reconocimiento que merecía. Es un coche inteligentemente diseñado, pensado para hacer la vida más fácil y agradable. Su combinación de un motor enérgico y eficiente, un comportamiento dinámico y, sobre todo, una accesibilidad revolucionaria, lo convierten en una opción excepcionalmente lógica y emocional para la vida moderna. Es más que un coche; es un compañero de familia ingenioso y leal.




