Especificaciones y análisis del Ford B-MAX
Potencia
125CV
Par
200Nm
Consumo
4.9l/100
Emisiones
114g/km
0-100 km/h
11.2s
Vel. Máx.
189km/h
Peso
1279kg
Precio
18,659€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
318 L
48 L
92 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Ford B-MAX Colourline 1.0 Ecoboost 125 CV Auto-Start-Stop (2016-2018)
Descripción general
El Ford B-MAX no es un monovolumen pequeño más; es una declaración de intenciones, una oda a la inteligencia y a la funcionalidad. Nacido en 2012, este coche llegó para resolver un problema real de las familias urbanas: el acceso. Con una solución tan audaz como brillante, el B-MAX se grabó en la memoria como un vehículo que se atrevió a pensar diferente, ofreciendo un corazón espacioso en un cuerpo compacto y ágil.
Experiencia de conducción
Al volante, el B-MAX sorprende y enamora. El pequeño motor 1.0 EcoBoost de 125 CV es un prodigio de energía y elasticidad. Se siente vivo, empujando con un brío inesperado desde bajas vueltas gracias a su generoso par motor. La caja de cambios manual de 5 velocidades es precisa y te conecta con la conducción, haciendo que cada trayecto, ya sea por la ciudad o en carretera, sea una experiencia gratificante. A pesar de su altura, se siente aplomado y ágil, heredando ese dinamismo tan característico de Ford que te saca una sonrisa en cada curva.
Diseño y estética
El diseño del B-MAX es su alma y su mayor genialidad. La ausencia del pilar B central, combinada con las puertas traseras correderas, crea un acceso lateral sin precedentes de 1.5 metros. Es una sensación de libertad y facilidad que ningún otro coche de su clase puede ofrecer. Subir una silla infantil o simplemente entrar y salir en un aparcamiento estrecho se convierte en un acto de una simplicidad asombrosa. Por dentro, aunque los años se notan en la botonera, el espacio está increíblemente bien aprovechado, demostrando que la función y la forma pueden bailar en perfecta armonía.
Tecnología y características
Tecnológicamente, el B-MAX se centraba en lo práctico. El sistema Start-Stop ayuda a contener los consumos en la jungla urbana, y su motor EcoBoost fue en su día una revolución en ingeniería, demostrando que la eficiencia no está reñida con la potencia. El sistema de conectividad SYNC de Ford permitía un control por voz básico pero efectivo para la música y las llamadas, manteniendo al conductor conectado sin distracciones. No abruma con pantallas, sino que ofrece la tecnología justa para hacer la vida a bordo más sencilla y segura.
Competencia
En su momento, el Ford B-MAX se enfrentó a rivales ingeniosos como el Opel Meriva y sus puertas de apertura inversa, o a superventas como el Citroën C3 Picasso y el Fiat 500L. Sin embargo, ninguno lograba la combinación de acceso total y placer de conducción que ofrecía el B-MAX. Mientras otros apostaban por la modularidad interior o el diseño peculiar, Ford entregó una solución estructural única que lo convirtió en el rey indiscutible de la accesibilidad en formato compacto.
Conclusión
El Ford B-MAX es más que un coche; es un compañero de vida inteligente y lleno de corazón. Es la elección perfecta para quienes valoran la practicidad por encima de todo, pero no quieren renunciar a la alegría de conducir. Su audaz diseño sin pilar central no fue un capricho, sino una solución brillante a un problema cotidiano. Es un vehículo que, incluso años después, sigue siendo un ejemplo de innovación y empatía hacia las necesidades del conductor y su familia.