Especificaciones y análisis del Ford C-MAX
Potencia
90CV
Par
215Nm
Consumo
4.8l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
13.1s
Vel. Máx.
174km/h
Peso
1391kg
Precio
16,870€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
550 L
55 L
66 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Ford Focus C-Max Ambiente 1.6 TDCi 90 CV (2005-2006)
Descripción general
El Ford Focus C-Max de 2004 irrumpió en el mercado como una bocanada de aire fresco para las familias que buscaban algo más que un simple monovolumen. Con el corazón de un Focus y el alma de un vehículo familiar, esta versión con el motor 1.6 TDCi de 90 CV prometía un equilibrio perfecto entre la eficiencia para el día a día y el placer de conducir que siempre ha caracterizado a Ford.
Experiencia de conducción
Ponerse al volante de este C-Max es una experiencia gratificante. Aunque sus 90 caballos no te pegarán al asiento, el generoso par motor de 215 Nm disponible desde muy bajas vueltas le otorga una agilidad sorprendente en ciudad y carreteras secundarias. Lo que realmente enamora es su chasis. La suspensión, firme pero no incómoda, y una dirección hidráulica precisa, te hacen olvidar que conduces un monovolumen. Se siente ágil, estable y transmite una confianza que invita a disfrutar de cada curva, un rasgo distintivo de Ford que lo diferenciaba claramente de sus competidores.
Diseño y estética
Su diseño exterior es funcional y discreto, un reflejo de la estética de principios de los 2000. No busca girar cabezas, sino ofrecer la máxima practicidad. Donde realmente brilla es en su interior: un espacio amplio, luminoso y versátil. La posición de conducción elevada ofrece una visibilidad excelente, y su maletero de 550 litros es un aliado incondicional para los viajes en familia. Los materiales, aunque sencillos, están pensados para resistir el paso del tiempo y el ajetreo diario.
Tecnología y características
En su época, el motor 1.6 TDCi con inyección por conducto común y turbo era una pieza de ingeniería moderna, centrado en ofrecer un consumo muy bajo de 4.8 l/100km. Sin embargo, visto desde hoy, su equipamiento tecnológico es básico. Contaba con lo esencial para la seguridad, como ABS y airbags, pero carecía de las asistencias a la conducción actuales. El entretenimiento se limitaba a una radio con CD, recordándonos una era donde la tecnología más importante estaba bajo el capó y en el chasis.
Competencia
El Ford C-Max se enfrentó a gigantes del segmento como el Renault Scénic, el rey de la modularidad, el Citroën Xsara Picasso, con su diseño audaz y confort, y el sobrio y bien construido Volkswagen Touran. Frente a ellos, el C-Max no siempre ganaba en espacio puro o en número de huecos portaobjetos, pero su argumento de venta era imbatible: ninguno ofrecía una experiencia de conducción tan dinámica y satisfactoria.
Conclusión
El Ford C-Max 1.6 TDCi 90 CV fue, y sigue siendo, una elección inteligente y pasional. Es un coche que demostró que la practicidad familiar no tiene por qué estar reñida con las sensaciones al volante. Su excelente chasis, combinado con un motor diésel económico y solvente, lo convierten en un vehículo redondo y un recuerdo entrañable de la época dorada de los monovolúmenes compactos. Un coche honesto, fiable y, sobre todo, muy agradable de conducir.




