Especificaciones y análisis del Ford C-MAX
Potencia
109CV
Par
240Nm
Consumo
4.5l/100
Emisiones
119g/km
0-100 km/h
11.3s
Vel. Máx.
185km/h
Peso
1392kg
Precio
19,262€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
473 L
55 L
80 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Ford C-MAX Ghia 1.6 TDCi 109 CV (2008-2010)
Descripción general
El Ford C-MAX de 2007, especialmente en su acabado Ghia, representa ese equilibrio casi perfecto que muchas familias buscan: la funcionalidad de un monovolumen y el alma de un turismo. No es solo un vehículo para desplazarse, es un compañero de viaje que promete hacer de cada trayecto una experiencia, combinando un espacio generoso con el placer de conducir que caracteriza a Ford.
Experiencia de conducción
Al volante, el C-MAX sorprende y enamora. Su motor 1.6 TDCi de 109 CV, con un par motor de 240 Nm disponible desde bajas vueltas, se siente voluntarioso y lleno de vida, moviendo el conjunto con una soltura inesperada. Pero la verdadera magia reside en su chasis. La suspensión, firme pero nunca incómoda, dibuja las curvas con una precisión y agilidad que te hacen olvidar que conduces un coche familiar. Es un vehículo que inspira confianza y te invita a disfrutar de la carretera, no solo a transitarla.
Diseño y estética
El lenguaje de diseño 'Kinetic Design' de Ford le sienta de maravilla. Sus líneas fluidas, el frontal afilado y una silueta dinámica consiguen que el C-MAX escape de la estética cúbica de sus rivales. Es un monovolumen con un toque de deportividad y elegancia. Por dentro, el acabado Ghia ofrece un ambiente acogedor y bien resuelto, donde la ergonomía y la sensación de espacio priman. Cada detalle está pensado para la vida a bordo, con una modularidad que se adapta a las necesidades de cada día y un maletero de 473 litros listo para cualquier aventura.
Tecnología y características
Para su época, el C-MAX Ghia estaba generosamente equipado. Contaba con elementos de confort que hacían los viajes más placenteros, como el climatizador o el control de crucero. Su tecnología se centraba en la eficiencia y la seguridad, con un motor diésel common-rail moderno y de bajo consumo, marcando solo 4.5 litros a los cien. Aunque no encontramos las pantallas táctiles de hoy, su dotación era completa y funcional, un reflejo de la tecnología bien entendida: aquella que sirve al conductor sin abrumarlo.
Competencia
En un segmento tan competido, el Ford C-MAX se enfrentaba a gigantes como el Renault Scénic, el Citroën C4 Picasso o el Volkswagen Touran. Mientras sus rivales franceses apostaban por el confort absoluto y el alemán por la sobriedad y calidad, el C-MAX siempre fue el elegido por aquellos conductores que no querían renunciar a una conexión especial con el asfalto. Era, y sigue siendo, la referencia dinámica de la categoría.
Conclusión
El Ford C-MAX 1.6 TDCi Ghia es mucho más que la suma de sus partes. Es la prueba de que un coche familiar no tiene por qué ser aburrido. Ofrece espacio, versatilidad y un consumo ridículo, pero su verdadero valor es la sonrisa que te saca en una carretera de curvas. Es una compra inteligente con el corazón, un vehículo que cuida de tu familia sin descuidar tu pasión por conducir.




