Especificaciones y análisis del Ford Focus
Potencia
114CV
Par
155Nm
Consumo
6.4l/100
Emisiones
155g/km
0-100 km/h
10.9s
Vel. Máx.
193km/h
Peso
1322kg
Precio
16,285€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 4 puertas
526 L
55 L
84 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Ford Focus Sedan Ghia 1.6 Ti-VCT 115cv (2005-2007)
Descripción general
El Ford Focus Sedán de 2005 no es solo un coche; es el recuerdo de una época dorada para las berlinas compactas. En su acabado Ghia, representaba el equilibrio perfecto entre la funcionalidad familiar y un toque de distinción, un vehículo que prometía fiabilidad y, sobre todo, el placer de conducir que siempre ha caracterizado a Ford.
Experiencia de conducción
Ponerse al volante de este Focus es redescubrir una conexión pura con la carretera. Su motor 1.6 Ti-VCT de 114 CV, aunque modesto, se siente enérgico y dispuesto a subir de vueltas con un sonido agradable. Pero la verdadera magia reside en su chasis. La suspensión trasera multibrazo, una joya en su segmento, te regala una confianza absoluta en cada curva y un confort de marcha que te hace devorar kilómetros sin cansancio. Es un coche que te invita a disfrutar del viaje, no solo a llegar a tu destino.
Diseño y estética
Con una silueta más madura y elegante que su predecesor, el Focus Sedán proyecta una imagen de solidez y buen gusto. Sus líneas fluidas culminan en una zaga bien integrada que esconde un maletero sorprendentemente espacioso de 526 litros. El acabado Ghia elevaba la experiencia interior con mejores tapicerías y acabados, creando un ambiente cálido y acogedor, un refugio del mundo exterior donde todo está en su sitio, pensado para el conductor.
Tecnología y características
En su momento, el Focus Ghia ofrecía un equipamiento generoso que hacía la vida a bordo más sencilla, como el climatizador automático o el control de velocidad. La tecnología Ti-VCT del motor era una muestra del ingenio de Ford para optimizar el rendimiento y el consumo. Sin embargo, hoy su encanto radica precisamente en su sencillez analógica: no hay pantallas que distraigan, solo la información esencial para centrarse en la conducción. Es un coche que se conduce, no que te conduce.
Competencia
Luchaba en un campo de batalla poblado por gigantes como el Volkswagen Jetta, el Opel Astra Sedán o el Renault Mégane Sedán. Mientras algunos rivales apostaban por un interior más sobrio o un diseño más atrevido, el Focus siempre jugó la carta ganadora del dinamismo. Era la elección de quien buscaba algo más que un simple medio de transporte; era el coche para el conductor entusiasta que también necesitaba espacio y practicidad.
Conclusión
Este Ford Focus Sedán Ghia es mucho más que una berlina de casi veinte años. Es un testimonio de la ingeniería centrada en el conductor, un coche honesto, fiable y sorprendentemente divertido. Representa la compra inteligente que también satisface el corazón, un compañero leal que demostró que un coche familiar no tenía por qué ser aburrido. Un clásico moderno que sigue despertando sonrisas.




