Especificaciones y análisis del Ford Focus
Potencia
125CV
Par
165Nm
Consumo
7l/100
Emisiones
167g/km
0-100 km/h
10.4s
Vel. Máx.
200km/h
Peso
1325kg
Precio
16,430€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 4 puertas
537 L
55 L
92 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Ford Focus Sedán Trend 1.8 125 CV Flexifuel (2008)
Descripción general
El Ford Focus Sedán de 2008 no es solo una berlina familiar, es la encarnación de un equilibrio casi perfecto. En una época de cambios, Ford nos entregó un coche que combinaba la practicidad de sus cuatro puertas y enorme maletero con el alma dinámica que siempre ha caracterizado al Focus. Su motor Flexifuel de 125 caballos era una declaración de intenciones, una mirada hacia un futuro más sostenible sin sacrificar ni una gota de emoción al volante.
Experiencia de conducción
Ponerse a los mandos de este Focus es redescubrir el placer de conducir. Su motor 1.8 atmosférico te pide que lo lleves alto de vueltas, y es ahí, por encima de las 4000 rpm, donde sus 125 CV cantan y empujan con alegría. Pero la verdadera magia reside en su chasis. La suspensión multibrazo trasera, una joya de la ingeniería en su segmento, te conecta con el asfalto de una manera íntima y segura. Cada curva se convierte en una invitación a disfrutar, sintiendo un coche ágil, preciso y noble que transmite una confianza absoluta.
Diseño y estética
El 'Kinetic Design' de Ford vistió a esta generación del Focus con un traje afilado y musculoso. Los faros rasgados y la parrilla trapezoidal le daban una mirada agresiva que se suavizaba elegantemente en su versión sedán. El resultado es una silueta equilibrada y atemporal. Por dentro, el salto cualitativo fue notable, con un salpicadero de formas modernas y una ergonomía bien estudiada, aunque hoy sus plásticos y disposición nos recuerden inevitablemente su edad.
Tecnología y características
La gran bandera tecnológica de este Focus era, sin duda, su capacidad Flexifuel. La posibilidad de funcionar con bioetanol E85 lo convertía en un pionero en su categoría, una apuesta valiente por la ecología en 2008. Más allá de su motor, su principal proeza tecnológica estaba oculta a la vista: un chasis y un esquema de suspensiones tan avanzado que avergonzaba a rivales de categorías superiores. El resto del equipamiento era correcto para su tiempo, centrado en la funcionalidad.
Competencia
En el competitivo segmento de las berlinas compactas, el Focus Sedán se enfrentaba a gigantes como el Volkswagen Jetta, que jugaba la carta de la sobriedad y el confort, o el Opel Astra Sedán. También luchaba contra el Renault Mégane Sedán, enfocado en la comodidad y la seguridad. Sin embargo, ninguno de sus rivales podía igualar la brillantez de su comportamiento dinámico. El Focus ofrecía una conexión hombre-máquina, una diversión al volante, que simplemente estaba en otra liga.
Conclusión
El Ford Focus Sedán 1.8 Flexifuel de 2008 es uno de esos coches que dejan huella. Fue la prueba de que un coche familiar no tenía por qué ser aburrido. Ofrecía espacio y la sensatez de una berlina, pero lo envolvía todo en el mejor chasis de su clase y un motor con carácter. Es un coche para recordar con cariño, una máquina honesta y brillantemente diseñada que priorizaba las sensaciones y la ingeniería sobre los artificios.




