Especificaciones y análisis del Ford Focus
Potencia
95CV
Par
230Nm
Consumo
4.5l/100
Emisiones
117g/km
0-100 km/h
12.6s
Vel. Máx.
182km/h
Peso
1345kg
Precio
17,300€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
5 / 4 puertas
475 L
53 L
70 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Ford Focus Sedán Trend 1.6 TDCi 95 CV (2012-2014)
Descripción general
El Ford Focus Sedán de 2011 se presentó como una declaración de intenciones, un coche que no solo buscaba cumplir con las expectativas de una familia, sino superarlas. En su versión Trend con el motor 1.6 TDCi de 95 CV, representaba el equilibrio perfecto entre la eficiencia para el día a día y el placer de conducir que siempre ha caracterizado a Ford. Es un coche que te habla de viajes por carretera, de fiabilidad y de un diseño que, sin estridencias, se siente sólido y bien plantado.
Experiencia de conducción
Ponerse al volante de este Focus es redescubrir una conexión pura con la carretera. Sus 95 caballos pueden parecer modestos, pero el generoso par motor de 230 Nm desde muy bajas vueltas te regala una respuesta ágil y voluntariosa en la ciudad y en trayectos interurbanos. La caja de cambios manual de seis velocidades es precisa y te invita a jugar con ella. Sin embargo, la verdadera magia reside en su chasis. La suspensión, con un esquema multibrazo trasero poco común en su segmento, logra un compromiso sublime entre confort y agilidad, dibujando las curvas con una confianza que emociona y te hace sentir un piloto, incluso yendo a por el pan.
Diseño y estética
Visualmente, el Focus Sedán es la cara madura y elegante de la familia. Mientras el 5 puertas apostaba por una trasera más atrevida, esta berlina opta por la armonía y la proporción. Las líneas del 'Kinetic Design' de Ford fluyen desde un frontal afilado hasta una zaga bien integrada, creando una silueta dinámica y atemporal. Por dentro, el salto de calidad fue enorme. El salpicadero, con su diseño envolvente, te hace sentir en el centro de mando, aunque la profusión de botones en la consola central requiere un pequeño periodo de adaptación. Es un espacio pensado para ser disfrutado, no solo utilizado.
Tecnología y características
En su acabado Trend, este Focus ofrecía la tecnología justa y necesaria para hacer la vida a bordo más sencilla. No encontrarás las grandes pantallas táctiles de hoy, sino un sistema de infoentretenimiento funcional con una pequeña pantalla y una conectividad básica. La dirección con asistencia eléctrica fue una de sus grandes bazas, contribuyendo a su bajo consumo y ofreciendo un tacto excelente. Era la tecnología puesta al servicio de la eficiencia y la experiencia de conducción, sin artificios innecesarios que distrajeran de lo verdaderamente importante: el viaje.
Competencia
En su época, el Focus Sedán se enfrentó a duros competidores como el Volkswagen Jetta, el Opel Astra Sedán o el Renault Fluence. Mientras que el Jetta presumía de una imagen más sobria y una calidad de acabados ligeramente superior, y el Astra destacaba por su confort, ninguno lograba igualar la brillantez dinámica del chasis del Ford. El Focus siempre fue la elección de aquellos que, además de espacio y practicidad, buscaban una sonrisa en cada curva, un coche con alma que se sentía más vivo que sus rivales.
Conclusión
Este Ford Focus Sedán es mucho más que una simple berlina compacta diésel. Es un coche honesto, increíblemente eficiente y con un comportamiento dinámico que enamora. Representa una época en la que Ford demostró que un vehículo familiar no tenía por qué ser aburrido. Es una compra inteligente y pasional a partes iguales, un compañero de viaje fiel que te recordará en cada kilómetro por qué te gusta tanto conducir. Un coche que, a pesar de los años, sigue sintiéndose actual en lo esencial.




