Especificaciones y análisis del Ford Focus
Potencia
114CV
Par
155Nm
Consumo
6.4l/100
Emisiones
155g/km
0-100 km/h
10.8s
Vel. Máx.
190km/h
Peso
1285kg
Precio
15,985€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
385 L
55 L
84 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Ford Focus Berlina Ghia 1.6 Ti-VCT 115cv (2006-2007)
Descripción general
El Ford Focus de segunda generación no fue solo un coche, fue una declaración de intenciones. En su acabado Ghia, este compacto se vestía de gala para ofrecer un equilibrio casi perfecto entre la funcionalidad diaria y un toque de distinción. Con el motor 1.6 Ti-VCT de 115 caballos, prometía una experiencia de conducción ágil y refinada, convirtiéndose en el compañero ideal para quienes buscaban algo más que un simple medio de transporte.
Experiencia de conducción
Al volante, el Focus se siente vivo. Su chasis, una obra maestra de la ingeniería de la época, te comunica cada matiz de la carretera sin sacrificar el confort. El motor 1.6 Ti-VCT, aunque no es un portento de potencia, sube de vueltas con alegría y su sonido es agradable. La caja de cambios manual de cinco velocidades es precisa y te invita a jugar con ella. Es un coche que te hace sentir conectado a la conducción, un placer que se disfruta en cada curva y en cada viaje.
Diseño y estética
Su diseño exterior, más maduro y robusto que el de su predecesor, transmite una sensación de solidez y confianza. Las líneas fluidas y la silueta bien proporcionada han envejecido con dignidad. Por dentro, el acabado Ghia marcaba la diferencia con materiales de mayor calidad y detalles que elevaban la percepción del habitáculo. El espacio era generoso y la ergonomía, muy estudiada, hacía que todo estuviera al alcance de la mano, creando un ambiente acogedor y funcional.
Tecnología y características
Para su época, el Focus Ghia venía bien equipado. Contaba con elementos como el climatizador automático, control de velocidad y un sistema de sonido que cumplía su función. Sin embargo, la verdadera joya tecnológica se escondía bajo el capó: el sistema de distribución variable Ti-VCT, que optimizaba el rendimiento y el consumo del motor. En seguridad, ya ofrecía elementos esenciales como múltiples airbags y ABS, demostrando el compromiso de Ford con la protección de los ocupantes.
Competencia
En un segmento tan competido, el Focus se enfrentaba a gigantes como el Volkswagen Golf, el Opel Astra o el Renault Mégane. Mientras que el Golf presumía de acabados y el Mégane de un diseño atrevido, el Focus conquistaba corazones con su comportamiento dinámico. Ninguno de sus rivales directos lograba transmitir esa conexión tan especial entre el conductor, el coche y la carretera.
Conclusión
El Ford Focus 1.6 Ti-VCT Ghia es mucho más que un coche usado; es una experiencia. Representa una época en la que los coches se diseñaban para ser disfrutados al volante. Es una opción inteligente y pasional para quien valora la fiabilidad, la practicidad y, sobre todo, el puro placer de conducir. Un coche honesto, capaz y con un alma que todavía hoy sigue latiendo con fuerza.




