Especificaciones y análisis del Ford Mondeo
Potencia
174CV
Par
400Nm
Consumo
6l/100
Emisiones
159g/km
0-100 km/h
8.9s
Vel. Máx.
218km/h
Peso
1615kg
Precio
28,260€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
5 / 5 puertas
542 L
70 L
128 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Ford Mondeo Sportbreak Titanium 2.2 TDCi 175 CV (2008-2010)
Descripción general
El Ford Mondeo Sportbreak Titanium de 2007 no es solo una ranchera familiar, es una declaración de intenciones. Representa una época dorada en la que Ford supo combinar como nadie la practicidad de un vehículo espacioso con el alma y el corazón de un deportivo. Este coche fue diseñado para el padre o madre de familia que se niega a renunciar al placer de conducir, ofreciendo un equilibrio casi perfecto entre responsabilidad y emoción.
Experiencia de conducción
Al volante, el Mondeo se siente poderoso y aplomado. El motor 2.2 TDCi de 175 CV empuja con una contundencia que sorprende, gracias a sus 400 Nm de par disponibles desde muy bajas vueltas. Cada adelantamiento se convierte en un mero trámite, y los viajes largos por autopista son un auténtico deleite por su silencio y estabilidad. A pesar de su tamaño, su chasis es una obra de arte que transmite confianza y agilidad en carreteras de curvas, haciéndote olvidar que conduces un vehículo familiar.
Diseño y estética
El diseño 'Kinetic Design' de Ford alcanza su máxima expresión en esta carrocería Sportbreak. Las líneas fluidas y musculosas le otorgan una presencia atlética y elegante que ha envejecido maravillosamente. El acabado Titanium, con sus llantas de 17 pulgadas y detalles cromados, subraya su carácter premium. Es un coche que proyecta dinamismo incluso estando parado, una escultura rodante que fusiona con maestría la funcionalidad de su enorme maletero con una estética que sigue girando cabezas.
Tecnología y características
Para su época, el Mondeo Titanium era un escaparate tecnológico. Más allá de su avanzado motor diésel common-rail, podía equipar elementos que hoy son comunes pero entonces eran de vanguardia, como el control de crucero adaptativo, la instrumentación digital Ford Convers+ o un sistema de infoentretenimiento completo. La sensación era la de estar en un coche de un segmento superior, donde el confort y la asistencia al conductor eran una prioridad absoluta.
Competencia
En un mercado ferozmente competido, el Mondeo Sportbreak se enfrentó a titanes como el Volkswagen Passat Variant, el Opel Insignia Sports Tourer o el Peugeot 407 SW. Sin embargo, el Ford siempre jugó una carta ganadora: su comportamiento dinámico. Mientras muchos rivales se centraban exclusivamente en el confort, el Mondeo ofrecía una experiencia de conducción más rica y comunicativa, plantando cara incluso a modelos premium como el Audi A4 Avant o el BMW Serie 3 Touring en espacio y placer al volante.
Conclusión
Este Ford Mondeo Sportbreak es mucho más que un coche; es un compañero de vida versátil y emocionante. Es la prueba de que se puede tener todo: un espacio interior cavernoso para la familia y el equipaje, y un motor potente y un chasis afinado para disfrutar de cada kilómetro. Un vehículo que evoca la nostalgia de los grandes ruteros diésel, una máquina soberbia que cumplía con creces en todos los frentes y que dejó una huella imborrable.
