Especificaciones y análisis del Honda CR-V
Potencia
150CV
Par
350Nm
Consumo
5.8l/100
Emisiones
154g/km
0-100 km/h
9.7s
Vel. Máx.
190km/h
Peso
1653kg
Precio
33,700€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
AWD
5 / 5 puertas
589 L
58 L
110 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Honda CR-V 2.2 i-DTEC 4WD Lifestyle · 150 CV (2012-2015)
Descripción general
El Honda CR-V de 2013 no es solo un SUV, es un refugio sobre ruedas. Con su potente motor diésel 2.2 i-DTEC de 150 CV y su tracción total 4WD, se presenta como el compañero de viaje ideal, prometiendo aventuras familiares con una sensación de seguridad y confianza que solo Honda sabe inspirar. Es un coche que te invita a crear recuerdos, kilómetro a kilómetro.
Experiencia de conducción
Al volante, el CR-V transmite una calma poderosa. El motor empuja con una fuerza contundente y lineal desde bajas vueltas, gracias a sus 350 Nm de par, haciendo que cada adelantamiento sea un mero trámite. La caja de cambios manual de seis velocidades es precisa y agradable, conectándote con la conducción. Su suspensión absorbe las irregularidades con una suavidad notable, convirtiendo los largos trayectos en una experiencia relajante, mientras la tracción total te susurra al oído que no hay camino que se te resista.
Diseño y estética
Su diseño es una declaración de intenciones: robusto pero refinado. Las líneas fluidas recorren una carrocería imponente que, sin embargo, se siente ágil y moderna. Pero es al abrir las puertas donde el CR-V te conquista por completo. El espacio es simplemente colosal, con un maletero de 589 litros que parece no tener fondo, listo para acoger todo el equipaje de una vida. Los materiales, sin ser lujosos, desprenden una calidad y un ajuste que auguran años de servicio impecable.
Tecnología y características
La tecnología a bordo del CR-V está pensada para hacer la vida más fácil, no para abrumar. Elementos como el sistema Start/Stop contribuyen a una eficiencia sorprendente para su tamaño. La dirección con asistencia eléctrica ofrece un manejo suave en ciudad y firme en carretera. Aunque su sistema de infoentretenimiento pueda parecer sencillo para los estándares actuales, cumple su función con una lógica japonesa, permitiéndote centrarte en lo verdaderamente importante: el placer de conducir y disfrutar del paisaje.
Competencia
En un mercado competido con gigantes como el Toyota RAV4, el Ford Kuga o el Volkswagen Tiguan, el Honda CR-V siempre ha jugado su propia liga. Mientras otros apostaban por diseños más agresivos o tecnologías más llamativas, el CR-V se ganaba el corazón de sus conductores con un argumento irrefutable: un equilibrio magistral entre un espacio interior sin parangón, una fiabilidad legendaria y un confort de marcha soberbio.
Conclusión
El Honda CR-V 2.2 i-DTEC es mucho más que la suma de sus partes. Es una elección inteligente y emocional. Un vehículo que no necesita gritar sus virtudes porque las demuestra en cada viaje. Representa la tranquilidad de saber que tienes un coche capaz, espacioso y, sobre todo, increíblemente fiable. Es una compra hecha con la cabeza, pero que se disfruta con el corazón.