Hyundai Santa Fe 2.0 CRDi VGT Style Aut. · 125 CV (2004-2006)

2001
Gasóleo
AWD
Automático 4v

Especificaciones y análisis del Hyundai Santa Fe

Potencia

125CV

Par

285Nm

Consumo

9.1l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

15.3s

Vel. Máx.

165km/h

Peso

1743kg

Precio

27,800

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Automático 4v

Tracción

AWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

690 L

Depósito

65 L

Potencia

92 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima125 CV / 92 kW
Par máximo285 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónAutomático 4v

Capacidades

Depósito65 L
Maletero690 L

Análisis detallado del Hyundai Santa Fe 2.0 CRDi VGT Style Aut. · 125 CV (2004-2006)

Descripción general

El Hyundai Santa Fe de primera generación fue mucho más que un simple SUV; fue una declaración de intenciones. En una época en la que los todocaminos eran un lujo, Hyundai irrumpió con un vehículo que prometía espacio, versatilidad y la seguridad de la tracción total a un precio que lo ponía al alcance de muchas familias. Fue el coche que demostró que la aventura no tenía por qué ser cara, convirtiéndose en un compañero fiel para miles de hogares y consolidando la imagen de Hyundai como una marca seria y fiable.

Experiencia de conducción

Ponerse al volante del Santa Fe 2.0 CRDi es una experiencia que te transporta a una conducción más pura y tranquila. Sus 125 caballos no buscan récords de aceleración, sino ofrecer una respuesta solvente y constante gracias a un motor diésel robusto y lleno de par a bajas vueltas. La caja de cambios automática de 4 velocidades, suave y sin pretensiones, junto a la tracción total, inspira una profunda sensación de seguridad y control en cualquier circunstancia. Es un coche que te invita a disfrutar del viaje, con una suspensión cómoda que filtra las irregularidades del camino, recordándote que lo importante no es llegar rápido, sino llegar juntos.

Diseño y estética

El diseño del Santa Fe es inconfundible y audaz, una oda a las formas redondeadas y musculosas que le otorgan una personalidad única y amigable. Rompió con la estética cuadrada de los todoterrenos tradicionales, proponiendo una imagen robusta pero accesible. Por dentro, la funcionalidad reina sobre el lujo. Los plásticos son duros y los acabados sencillos, pero todo está diseñado para durar y resistir el trato de una familia activa. Su enorme espacio interior y la gran superficie acristalada crean un ambiente luminoso y acogedor, un refugio perfecto para ver pasar el paisaje.

Tecnología y características

Para su época, el Santa Fe estaba sorprendentemente bien equipado. El motor CRDi con turbo de geometría variable era una tecnología diésel avanzada que garantizaba eficiencia y fiabilidad. La combinación de tracción integral permanente y cambio automático era un lujo en su segmento. Aunque carece de las pantallas y la conectividad digital de hoy, su tecnología se centraba en lo esencial: la mecánica robusta, el confort climático y la seguridad activa, elementos que definían un coche verdaderamente moderno a principios de los 2000.

Competencia

En el competitivo mercado de los SUV compactos, el Santa Fe se enfrentó a gigantes como el Toyota RAV4, el Honda CR-V o el Nissan X-Trail. Mientras sus rivales japoneses a menudo presumían de un mayor refinamiento o una imagen de marca más establecida, el Hyundai contraatacaba con una fórmula imbatible: más espacio, más equipamiento y un precio significativamente más bajo. Fue el David que supo plantar cara a los Goliat, conquistando a aquellos que valoraban la inteligencia de la compra por encima de todo.

Conclusión

El Hyundai Santa Fe de 2004 no es solo un coche, es el recuerdo de una época y el símbolo de la democratización del SUV. Representa la compra inteligente, el vehículo honesto y trabajador que nunca te falla. Su valor no reside en la velocidad ni en el lujo, sino en su inmensa practicidad, su reconfortante fiabilidad y el encanto de un diseño que ha envejecido con dignidad. Es un clásico moderno que se ganó el corazón de muchas familias por ser, simplemente, el coche que necesitaban.