Especificaciones y análisis del Hyundai Veloster
Potencia
140CV
Par
167Nm
Consumo
5.9l/100
Emisiones
137g/km
0-100 km/h
9.7s
Vel. Máx.
201km/h
Peso
1260kg
Precio
27,047€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 6v
FWD
4 / 4 puertas
320 L
50 L
103 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Hyundai Veloster 1.6 GDI 140 CV Sport S Stop&Go (2012-2013)
Descripción general
El Hyundai Veloster de 2011 no es solo un coche, es una declaración de audacia. En un mundo de diseños conservadores, Hyundai se atrevió a lanzar un coupé asimétrico que fusiona la estética deportiva con una sorprendente practicidad. Con su motor 1.6 GDI de 140 CV, prometía una experiencia de conducción tan única como su silueta, un vehículo nacido para no dejar a nadie indiferente y para conquistar corazones que buscan algo más que simple transporte.
Experiencia de conducción
Al volante, el Veloster te pide que te involucres. Su motor atmosférico de 140 CV entrega la potencia de una forma lineal y honesta, exigiéndote jugar con su precisa caja de cambios manual de seis velocidades para extraer todo su carácter. No es un velocista puro, pero su chasis ágil y su dirección directa te regalan una conexión pura con el asfalto en cada curva. Se siente ligero y dispuesto, una invitación constante a disfrutar de la conducción, aunque la suspensión firme y sus llantas de 18 pulgadas te recuerdan su naturaleza deportiva en cada imperfección del camino.
Diseño y estética
Aquí es donde el Veloster se convierte en leyenda. Su diseño es una obra de arte funcional, una escultura en movimiento que rompió todos los moldes. La configuración de tres puertas laterales, una de coupé en el lado del conductor y dos convencionales en el del pasajero, es un golpe de genio que redefine la practicidad sin sacrificar un ápice de su alma deportiva. Sus líneas afiladas, la zaga musculosa con el escape central y esa mirada agresiva crean una presencia magnética que, incluso hoy, sigue girando cabezas y provocando sonrisas.
Tecnología y características
Para su época, el acabado Sport S venía cargado de alma tecnológica. El sistema Stop&Go buscaba la eficiencia en la ciudad, mientras que en el interior, una pantalla táctil central se erigía como el corazón del entretenimiento y la conectividad. Contaba con elementos de confort como el climatizador automático o el acceso y arranque sin llave, creando un ambiente moderno y acogedor que te hacía sentir en un coche adelantado a su tiempo, donde la tecnología estaba al servicio de una experiencia de conducción completa.
Competencia
El Veloster luchó en un terreno muy personal contra gigantes como el Volkswagen Scirocco o el Renault Mégane Coupé. Mientras sus rivales apostaban por la potencia bruta o la tradición, el Hyundai jugaba en su propia liga: la de la originalidad y el atrevimiento. Ninguno de sus competidores podía ofrecer su revolucionaria configuración de puertas ni su impactante personalidad estética, convirtiéndolo en la elección del corazón para quienes deseaban destacar.
Conclusión
El Hyundai Veloster es mucho más que un coupé compacto; es el testimonio de que se puede ser diferente y triunfar. Es un coche para el conductor que valora el diseño y la emoción por encima de las cifras puras. Su equilibrio entre un estilo inolvidable y una conducción divertida lo consagra como un vehículo de culto, una pieza valiente y especial que demostró al mundo que Hyundai sabía cómo construir coches con alma. Un futuro clásico que se ganó su lugar en la historia del motor.




