Especificaciones y análisis del Jeep Cherokee
Potencia
163CV
Par
400Nm
Consumo
9.3l/100
Emisiones
246g/km
0-100 km/h
13.5s
Vel. Máx.
174km/h
Peso
1949kg
Precio
31,350€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
AWD
5 / 5 puertas
878 L
78 L
120 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Jeep Cherokee 2.8 CRD Sport Plus · 163 CV (2006-2007)
Descripción general
El Jeep Cherokee de 2005 es mucho más que un simple todoterreno; es una declaración de intenciones. Representa la libertad en estado puro, un vehículo diseñado para quienes no se conforman con el asfalto y sienten la llamada de la aventura. Su motor diésel 2.8 CRD de 163 CV promete la fuerza necesaria para superar cualquier obstáculo, convirtiendo cada viaje en una experiencia memorable.
Experiencia de conducción
Ponerse al volante del Cherokee es sentir el poder bruto de su motor diésel de 400 Nm de par. No es un velocista, pero la contundencia con la que empuja desde bajas revoluciones inspira una confianza absoluta fuera del asfalto. La transmisión manual de 6 velocidades te conecta directamente con la máquina, mientras que su robusta suspensión te recuerda constantemente que estás en un auténtico 4x4, capaz de devorar caminos rotos con una solidez que emociona.
Diseño y estética
Su diseño es inconfundible y atemporal. Las líneas cuadradas, la icónica parrilla de siete ranuras y los faros redondos gritan 'Jeep' desde cualquier ángulo. No busca la elegancia de un SUV moderno, sino la honestidad de una herramienta robusta y funcional. Por dentro, la simplicidad es la norma, con materiales duraderos pensados para resistir el trato duro de la aventura, priorizando el espacio sobre el lujo superfluo.
Tecnología y características
En una era anterior a las pantallas táctiles, la tecnología del Cherokee se centraba en lo esencial: la capacidad todoterreno. Su motor diésel con inyección por conducto común y turbo de geometría variable era avanzado para la época. Sin embargo, el verdadero corazón tecnológico reside en su sistema de tracción total, un mecanismo probado y fiable diseñado para ofrecer el máximo agarre cuando las condiciones se complican. Es tecnología con un propósito claro: llevarte más lejos.
Competencia
En su época, el Cherokee se medía con gigantes como el Mitsubishi Montero, el Toyota Land Cruiser o el Land Rover Discovery. Mientras sus rivales japoneses destacaban por su fiabilidad legendaria y el británico por un mayor refinamiento, el Jeep ofrecía un carácter único y una imagen inconfundiblemente americana. Era la opción pasional, la que elegías con el corazón, buscando esa conexión especial con el espíritu de aventura.
Conclusión
El Jeep Cherokee 2.8 CRD no es un coche para todo el mundo. Es una máquina con alma, exigente en carretera pero inmensamente gratificante cuando el asfalto desaparece. Es la elección perfecta para quien valora la autenticidad y el legado de una marca legendaria. Comprar uno hoy es adquirir un pedazo de historia del todoterreno, un compañero fiel para crear recuerdos imborrables lejos de lo convencional.




