Jeep Wrangler 2.8 CRD Sahara · 177 CV (2007-2008)

2007
Gasóleo
AWD
Manual 6v
Jeep Wrangler - Vista 1
Jeep Wrangler - Vista 2
Jeep Wrangler - Vista 3
Jeep Wrangler - Vista 4

Especificaciones y análisis del Jeep Wrangler

Potencia

177CV

Par

400Nm

Consumo

9.9l/100

Emisiones

263g/km

0-100 km/h

11.7s

Vel. Máx.

180km/h

Peso

1880kg

Precio

32,660

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Manual 6v

Tracción

AWD

Plazas

4 / 3 puertas

Maletero

- L

Depósito

67 L

Potencia

130 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima177 CV / 130 kW
Par máximo400 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónManual 6v

Capacidades

Depósito67 L
Maletero0 L

Análisis detallado del Jeep Wrangler 2.8 CRD Sahara · 177 CV (2007-2008)

Descripción general

El Jeep Wrangler 2.8 CRD Sahara de 2007 es un icono, una declaración de intenciones sobre ruedas. Con su motor diésel de 177 CV y tracción total, este vehículo de 3 puertas no es solo un coche, es una invitación a la aventura, a explorar caminos donde otros solo ven obstáculos. Su precio de 32.660 € en su lanzamiento lo posicionaba como una opción robusta y auténtica para los amantes del off-road.

Experiencia de conducción

Conducir el Wrangler Sahara es una experiencia visceral. Su motor diésel de 2.8 litros y 177 CV, con un par motor de 400 Nm, ofrece una respuesta contundente, especialmente a bajas revoluciones, ideal para superar terrenos difíciles. La caja de cambios manual de 6 velocidades permite un control preciso, aunque la aceleración de 0 a 100 km/h en 11.7 segundos y una velocidad máxima de 180 km/h revelan que su hábitat natural no son las autopistas. La suspensión de eje rígido en ambos ejes, aunque excelente para el off-road, puede resultar algo áspera en asfalto, transmitiendo cada imperfección del camino. Sin embargo, es precisamente esa conexión con el terreno lo que enamora a sus conductores, ofreciendo una sensación de robustez y capacidad inigualable. El consumo combinado de 9.9 l/100km es un recordatorio de su naturaleza aventurera.

Diseño y estética

El diseño del Jeep Wrangler 2.8 CRD Sahara es inconfundible, una silueta que ha trascendido el tiempo y se ha convertido en un símbolo. Sus líneas cuadradas, la parrilla de siete ranuras y los faros redondos son elementos icónicos que evocan la herencia militar de la marca. La versión de 3 puertas acentúa su carácter compacto y ágil. Con una longitud de 4223 mm, una anchura de 1873 mm y una altura de 1840 mm, su presencia es imponente. Las ruedas de 255/75 R17 y los generosos pasos de rueda refuerzan su imagen todoterreno. El interior, aunque funcional, prioriza la durabilidad y la resistencia sobre el lujo, con materiales que soportan el uso rudo y la exposición a los elementos, manteniendo la esencia de un vehículo diseñado para la aventura.

Tecnología y características

La tecnología del Wrangler de 2007 se centra en su capacidad todoterreno. Su sistema de tracción total es el corazón de su ingeniería, diseñado para ofrecer la máxima adherencia en cualquier superficie. El motor diésel de inyección directa por conducto común, con turbo de geometría variable e intercooler, es un ejemplo de ingeniería robusta y eficiente para la época. Aunque carece de las sofisticadas ayudas a la conducción de los vehículos modernos, su dirección de recirculación de bolas y los frenos de disco ventilados delanteros y macizos traseros garantizan un control adecuado en situaciones extremas. La ausencia de un sistema Start/Stop y la etiqueta ambiental B reflejan una era donde la eficiencia no era la prioridad principal, sino la pura capacidad off-road.

Competencia

En su segmento, el Jeep Wrangler 2.8 CRD Sahara de 2007 se enfrentaba a rivales como el Land Rover Defender, otro icono del todoterreno puro, conocido por su robustez y capacidad. También competía con el Toyota Land Cruiser, que ofrecía un equilibrio entre capacidad off-road y confort en carretera, aunque con un enfoque menos radical. Otros posibles contendientes podrían ser el Nissan Patrol o el Mercedes-Benz Clase G, aunque este último se situaba en un escalón de lujo superior. El Wrangler se distinguía por su estética inconfundible, su filosofía de vehículo 'descapotable' y su enfoque sin concesiones hacia la aventura pura.

Conclusión

El Jeep Wrangler 2.8 CRD Sahara de 2007 es mucho más que un simple vehículo; es una leyenda sobre ruedas. Su diseño atemporal, su innegable capacidad todoterreno y la sensación de libertad que transmite al volante lo convierten en una elección perfecta para aquellos que buscan una experiencia de conducción auténtica y sin límites. Aunque su confort en carretera no sea su punto fuerte y su tecnología sea más funcional que vanguardista, su robustez y fiabilidad lo compensan con creces. Es un coche para los que viven la aventura, para los que no temen ensuciarse y para los que valoran la esencia pura del todoterreno. Un verdadero clásico que sigue conquistando corazones.