KIA pro_cee'd 1.6 CRDi 115 CV Active Aut. (2008-2010)

2008
Gasóleo
FWD
Automático 4v
KIA ceed - Vista 1
KIA ceed - Vista 2
KIA ceed - Vista 3
KIA ceed - Vista 4

Especificaciones y análisis del KIA ceed

Potencia

115CV

Par

255Nm

Consumo

5.9l/100

Emisiones

155g/km

0-100 km/h

12.6s

Vel. Máx.

180km/h

Peso

-kg

Precio

17,683

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Automático 4v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 3 puertas

Maletero

340 L

Depósito

53 L

Potencia

84.5 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima115 CV / 84.5 kW
Par máximo255 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónAutomático 4v

Capacidades

Depósito53 L
Maletero340 L

Análisis detallado del KIA pro_cee'd 1.6 CRDi 115 CV Active Aut. (2008-2010)

Descripción general

El KIA pro_cee'd 1.6 CRDi 115 CV Active Aut. de 2008 es un coche que marcó un antes y un después para la marca coreana. Con su diseño atrevido y su motor diésel eficiente, se presentaba como una opción muy interesante en el segmento de los compactos de tres puertas, buscando conquistar a un público joven y dinámico que valoraba tanto la estética como la funcionalidad. Su llegada al mercado europeo fue un claro mensaje de las ambiciones de KIA.

Experiencia de conducción

Al volante, el pro_cee'd ofrecía una experiencia de conducción equilibrada. El motor 1.6 CRDi de 115 CV, aunque no era un derroche de potencia, se mostraba voluntarioso y eficiente, especialmente en combinación con su transmisión automática de 4 velocidades, que proporcionaba transiciones suaves. La suspensión, tipo McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, ofrecía un buen compromiso entre confort y estabilidad, permitiendo disfrutar de los trayectos sin sobresaltos. La dirección asistida eléctrica contribuía a una conducción ágil en ciudad, mientras que en carretera mantenía una buena sensación de control. Era un coche que invitaba a disfrutar de cada viaje, con una respuesta predecible y un comportamiento noble.

Diseño y estética

El diseño del KIA pro_cee'd de 2008 era, sin duda, uno de sus puntos fuertes. Con su carrocería de tres puertas, presentaba una silueta más deportiva y juvenil que la versión de cinco puertas. Las líneas fluidas y dinámicas, junto con una parte trasera bien resuelta, le otorgaban una presencia atractiva y moderna. Los detalles como los faros y la parrilla frontal contribuían a una imagen fresca y distintiva, que se alejaba de los diseños más conservadores de la época. Era un coche que giraba cabezas y que transmitía una sensación de estilo y dinamismo.

Tecnología y características

En el apartado tecnológico, el pro_cee'd de 2008 incorporaba elementos que, si bien no eran revolucionarios, sí resultaban prácticos y funcionales para la época. Contaba con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler en su motor diésel, lo que optimizaba su rendimiento y eficiencia. La transmisión automática de 4 velocidades, aunque no era la más avanzada, ofrecía comodidad en la conducción diaria. En el interior, se esperaba un equipamiento acorde a su segmento, con sistemas de audio y climatización que hacían los viajes más agradables. La seguridad también era un punto importante, con frenos de disco en ambos ejes y una suspensión bien calibrada.

Competencia

En su segmento, el KIA pro_cee'd 1.6 CRDi 115 CV Active Aut. se enfrentaba a duros competidores como el Volkswagen Golf, el Opel Astra o el Ford Focus, todos ellos con versiones de tres puertas y motores diésel de potencia similar. También rivalizaba con modelos como el Renault Mégane Coupé o el SEAT León. Frente a ellos, el pro_cee'd ofrecía un diseño distintivo, una buena relación calidad-precio y una garantía que, en aquel entonces, ya empezaba a ser un referente en el mercado, lo que lo convertía en una alternativa muy a tener en cuenta para aquellos que buscaban algo diferente y fiable.

Conclusión

El KIA pro_cee'd 1.6 CRDi 115 CV Active Aut. de 2008 fue un coche que supo combinar un diseño atractivo con un motor diésel eficiente y un comportamiento dinámico. Representó un paso adelante para KIA en su consolidación en el mercado europeo, ofreciendo un producto competitivo y con personalidad. Era una opción ideal para quienes buscaban un compacto de tres puertas con un toque deportivo, sin renunciar a la practicidad y la economía de uso. Un coche que, sin duda, dejó una huella positiva y contribuyó a cambiar la percepción de la marca.