Especificaciones y análisis del KIA Shuma
Potencia
88CV
Par
135Nm
Consumo
7.9l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
-s
Vel. Máx.
180km/h
Peso
1121kg
Precio
10,812€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
440 L
50 L
65 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del KIA Shuma 1.5 16V LS · 88 CV (1998-2001)
Descripción general
El KIA Shuma de 1999 es un viaje al pasado, a una época en la que las marcas coreanas luchaban por hacerse un hueco en el competitivo mercado europeo. No era un coche que enamorara a primera vista, sino que conquistaba desde la razón: un sedán familiar honesto, espacioso y, sobre todo, asequible. Representa el esfuerzo y la ambición de KIA por ofrecer movilidad sin grandes alardes, centrándose en lo esencial para la familia.
Experiencia de conducción
Ponerse al volante del Shuma es redescubrir una conducción pura y sin filtros. Sus 88 caballos no buscan récords, sino moverte con solvencia y tranquilidad. El motor de 1.5 litros se siente voluntarioso si lo llevas a su régimen óptimo, y la caja manual de 5 velocidades te conecta directamente con la mecánica. La suspensión, pensada para el confort, absorbe bien las irregularidades, haciendo de cada viaje una experiencia serena, aunque carente de emoción deportiva. Es un coche para disfrutar del trayecto sin prisas.
Diseño y estética
Su diseño es un claro reflejo de finales de los 90. Con unas formas redondeadas y un frontal característico por sus dobles faros circulares, el Shuma intentaba tener una personalidad propia. Aunque no giraba cabezas, su carrocería de 5 puertas escondía su mayor virtud: una practicidad sobresaliente. El enorme portón trasero daba acceso a un maletero de 440 litros, una cifra generosa que lo convertía en un aliado perfecto para las necesidades familiares.
Tecnología y características
En un mundo dominado por pantallas y asistentes, la tecnología del Shuma nos recuerda la simplicidad de antaño. Su equipamiento era básico, centrado en lo funcional. No encontrarás ayudas electrónicas a la conducción ni sistemas multimedia complejos. Su mayor avance era un motor de 16 válvulas con inyección indirecta, una mecánica fiable y probada. Era un coche construido con una filosofía clara: la robustez mecánica por encima de los gadgets electrónicos.
Competencia
El KIA Shuma competía en un segmento muy reñido, luchando por atraer a clientes que buscaban el máximo valor por su dinero. Se enfrentaba a modelos como el Daewoo Nubira, su rival compatriota, pero también a versiones de acceso de coches europeos consolidados como el SEAT Córdoba, el Fiat Marea o el Renault Mégane Classic. Su principal arma era siempre un precio más bajo y un equipamiento de serie a menudo más completo.
Conclusión
El KIA Shuma es mucho más que un coche antiguo; es un testimonio del camino recorrido por la marca. Fue una compra inteligente y pragmática para miles de familias, un vehículo que cumplía su promesa de espacio, funcionalidad y economía sin pedir nada a cambio. Quizás no te robe el corazón por su estética o sus prestaciones, pero se gana el respeto por su honestidad y su espíritu de servicio incansable.
