Especificaciones y análisis del KTM X-Bow
Potencia
241CV
Par
310Nm
Consumo
7.5l/100
Emisiones
171g/km
0-100 km/h
3.9s
Vel. Máx.
220km/h
Peso
1125kg
Precio
64,358€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 6v
RWD
2 / - puertas
- L
35 L
177 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del KTM X-Bow · 241 CV (2009)
Descripción general
El KTM X-Bow no es simplemente un coche; es una declaración de intenciones, la materialización de la adrenalina sobre cuatro ruedas. Nacido de la experiencia de un gigante de las motocicletas, este vehículo rompe todos los esquemas para ofrecer una experiencia de conducción pura, sin filtros y brutalmente honesta. Es la máquina definitiva para quien busca sentir el asfalto como una extensión de su propio cuerpo.
Experiencia de conducción
Ponerse a los mandos del X-Bow es sumergirse en un torbellino de sensaciones. La aceleración de 0 a 100 km/h en 3.9 segundos te pega al asiento, mientras el viento y el sonido del motor turbo de 241 CV invaden tus sentidos. Sin parabrisas ni puertas, cada curva se siente con una inmediatez sobrecogedora. La dirección es telepática y el chasis comunica cada textura de la carretera, creando una conexión hombre-máquina que pocos vehículos pueden igualar.
Diseño y estética
Su diseño es la consecuencia directa de su propósito: rendimiento máximo. La carrocería es un esqueleto funcional que expone con orgullo su monocasco de fibra de carbono y sus suspensiones de competición. No hay un solo elemento superfluo. Su estética radical y agresiva no busca agradar a todos, sino intimidar al cronómetro y enamorar a los puristas que ven belleza en la ingeniería desnuda.
Tecnología y características
La joya de la corona es su chasis monocasco de fibra de carbono, una tecnología heredada directamente de la alta competición que le confiere una ligereza y rigidez extraordinarias. El corazón es un fiable y potente motor 2.0 TFSI de origen Audi, que entrega 310 Nm de par desde muy bajas vueltas. Aquí la tecnología no está en pantallas ni asistencias, sino en la calidad de sus componentes mecánicos, pensados para resistir el trato más exigente en circuito.
Competencia
En su exclusivo universo, el KTM X-Bow se mide con otras leyendas de la ligereza y la pureza como el Lotus Elise, el Ariel Atom o el Caterham Seven. Todos comparten la misma filosofía de 'menos es más', sacrificando el confort y la practicidad en el altar de las prestaciones y las sensaciones. Son máquinas que apelan directamente al corazón del conductor más apasionado.
Conclusión
El KTM X-Bow es una compra puramente emocional, un juguete exquisito para adultos que anhelan la emoción de un circuito. No es un coche para el día a día, es un antídoto contra el aburrimiento, una herramienta de precisión diseñada para dibujar sonrisas en cada curva y liberar adrenalina en cada recta. Es, en definitiva, una de las experiencias de conducción más auténticas y memorables que el dinero puede comprar.




