Especificaciones y análisis del Lancia Lybra
Potencia
110CV
Par
275Nm
Consumo
5.9l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
11.3s
Vel. Máx.
187km/h
Peso
1460kg
Precio
23,710€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
FWD
5 / 4 puertas
420 L
60 L
81 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Lancia Lybra 1.9 JTD LX · 110 CV (2001)
Descripción general
El Lancia Lybra de 1999 es más que una berlina; es una declaración de intenciones, un refugio de elegancia y confort italiano en un mundo obsesionado con la deportividad alemana. Nació para cautivar a quienes buscan distinción y un viaje sereno, envolviendo a sus ocupantes en una atmósfera única que solo Lancia sabía crear.
Experiencia de conducción
Conducir el Lybra 1.9 JTD es una experiencia de puro confort. Su motor diésel de 110 caballos, con un generoso par de 275 Nm desde bajas vueltas, empuja con suavidad y decisión, sin estridencias. No busca batir récords de aceleración, sino deslizarse por el asfalto con una compostura y un aislamiento acústico soberbios. Es un coche para devorar kilómetros sin fatiga, donde cada viaje se convierte en un placer relajado.
Diseño y estética
El diseño del Lybra es inconfundible y valiente, una oda a las formas clásicas y fluidas que huye de las aristas. Su frontal con la calandra histórica de Lancia y sus faros elípticos le otorgan una personalidad aristocrática. Por dentro, el ambiente es suntuoso, con un salpicadero que integra la tecnología en un mueble central de aspecto lujoso, y materiales que, en su día, buscaban transmitir una sensación de calidad y calidez excepcionales.
Tecnología y características
Para su época, el Lybra estaba bien dotado. Su corazón, el motor 1.9 JTD, fue pionero en la tecnología common-rail, ofreciendo una eficiencia y refinamiento notables. El chasis priorizaba el confort con una suspensión McPherson delantera y un esquema trasero sofisticado que filtraba las irregularidades con maestría. El sistema de infoentretenimiento integrado (ICS) centralizaba audio y climatización, un detalle avanzado que definía su carácter tecnológico y lujoso.
Competencia
El Lybra se enfrentó a gigantes consolidados como el Audi A4, el BMW Serie 3 y el Mercedes-Benz Clase C. Su lucha no era en el terreno de la potencia bruta, sino en el del carácter y la exclusividad. También competía con el Alfa Romeo 156, su primo más pasional, y otras berlinas como el Volvo S40 o el Ford Mondeo, destacando siempre por su enfoque en el lujo y el bienestar a bordo.
Conclusión
El Lancia Lybra es un coche para entendidos, una joya incomprendida que priorizó el alma sobre la máquina. Representa el último destello de la Lancia clásica, una marca que entendía el lujo como una experiencia sensorial. Hoy es una elección nostálgica y emocional, un futuro clásico que recompensa con un confort y un estilo que ya no se fabrican.