Lancia Phedra 2.0 JTD 16V 120 CV Oro (2008-2009)

2008
Gasóleo
FWD
Manual 6v
Lancia Phedra - Vista 1
Lancia Phedra - Vista 2
Lancia Phedra - Vista 3
Lancia Phedra - Vista 4

Especificaciones y análisis del Lancia Phedra

Potencia

120CV

Par

300Nm

Consumo

6.9l/100

Emisiones

182g/km

0-100 km/h

14.4s

Vel. Máx.

180km/h

Peso

1886kg

Precio

30,050

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Manual 6v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

830 L

Depósito

80 L

Potencia

88 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima120 CV / 88 kW
Par máximo300 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónManual 6v

Capacidades

Depósito80 L
Maletero830 L

Análisis detallado del Lancia Phedra 2.0 JTD 16V 120 CV Oro (2008-2009)

Descripción general

El Lancia Phedra de 2008 no es simplemente un monovolumen, es la interpretación italiana del viaje en familia. En una época dominada por la funcionalidad, Lancia apostó por infundir elegancia y alma en un vehículo espacioso, creando un salón rodante donde cada kilómetro se siente como una experiencia premium.

Experiencia de conducción

Al volante, el Phedra te envuelve en una atmósfera de calma y confort. Su motor diésel de 120 CV, aunque no busca proezas deportivas, entrega su par de 300 Nm con suavidad, ideal para llanear por autopista con una serenidad absoluta. La suspensión filtra las imperfecciones con maestría y la elevada postura de conducción transmite una sensación de dominio y seguridad. No es un coche para correr, es un coche para disfrutar del paisaje y la compañía, un devorador de kilómetros que nunca te fatigará.

Diseño y estética

Aquí es donde el Phedra se desmarca con orgullo. Comparte plataforma, pero no espíritu. Su frontal, con la icónica calandra de Lancia, y sus acabados cuidados le otorgan una distinción aristocrática. Por dentro, el espacio es monumental, una oda a la habitabilidad y la luz. Los materiales, para su tiempo, buscaban transmitir una calidez y un lujo que lo acercaban más a una berlina de representación que a un vehículo familiar convencional.

Tecnología y características

La tecnología del Phedra estaba al servicio del confort. Su instrumentación central, característica de la época, liberaba el campo de visión del conductor creando una sensación de amplitud única. Aunque no podemos compararlo con los sistemas actuales, ofrecía todo lo necesario para un viaje placentero y seguro, desde un climatizador eficaz hasta los elementos de seguridad activa y pasiva que se esperaban en su segmento, priorizando siempre el bienestar de sus ocupantes.

Competencia

Sus rivales más directos eran sus propios hermanos de proyecto: el Peugeot 807, el Citroën C8 y el Fiat Ulysse. Sin embargo, el Phedra siempre jugó en una liga ligeramente superior en cuanto a refinamiento. Más allá de su familia, se enfrentó a gigantes consolidados como el Renault Espace, el Ford Galaxy o el Volkswagen Sharan, frente a los cuales el Lancia esgrimía el poderoso argumento del diseño y la exclusividad italiana.

Conclusión

El Lancia Phedra es una elección emocional dentro de un segmento racional. Es el monovolumen para quien valora la belleza y el confort por encima de todo. Representa una forma de entender el automóvil familiar que se ha ido perdiendo, una que prioriza la elegancia y el placer de viajar. Hoy, es un futuro clásico que evoca una época en la que incluso el coche más práctico podía tener un corazón lleno de pasión.