Especificaciones y análisis del Lancia Ypsilon
Potencia
95CV
Par
128Nm
Consumo
6.6l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
10.9s
Vel. Máx.
175km/h
Peso
1055kg
Precio
14,828€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
4 / 3 puertas
215 L
47 L
70 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Lancia Ypsilon 1.4 16V Platino · 95 CV (2003-2006)
Descripción general
El Lancia Ypsilon de 2003 no es solo un coche; es una declaración de estilo italiano en formato compacto. Nacido para cautivar en la ciudad, este pequeño utilitario se desmarca de la multitud con una elegancia y un refinamiento que eran difíciles de encontrar en su segmento, ofreciendo una experiencia de 'pequeño lujo' a quien busca algo más que un simple medio de transporte.
Experiencia de conducción
Conducir el Ypsilon con su motor de 95 caballos es sentir la agilidad urbana en estado puro. Es un coche vivaz y enérgico, perfecto para callejear y responder con brío al acelerador. Su dirección eléctrica lo convierte en un juego de niños al aparcar, y aunque su suspensión prioriza el confort sobre la deportividad, transmite una sensación de aplomo y seguridad. El cambio manual de cinco velocidades te conecta con una conducción auténtica y placentera.
Diseño y estética
El diseño es el alma del Ypsilon. Sus líneas suaves y redondeadas, la icónica calandra Lancia y la posibilidad de carrocerías bicolor lo convierten en una pequeña obra de arte sobre ruedas. Por dentro, rompe moldes con su instrumentación central, un detalle que no solo es original, sino que crea una sensación de espacio y simetría. En el acabado Platino, los materiales de alta calidad envuelven a los ocupantes en una atmósfera sofisticada y acogedora.
Tecnología y características
Para su época, el Ypsilon estaba bien dotado. Más allá de su original cuadro de mandos central, ofrecía elementos de confort propios de segmentos superiores, como el climatizador automático o un sistema de sonido de calidad. La dirección asistida eléctrica con función 'City' fue una innovación que facilitaba enormemente las maniobras a baja velocidad, demostrando que la tecnología podía estar al servicio del confort diario.
Competencia
En un mercado que empezaba a valorar el diseño, el Ypsilon se enfrentó a rivales con fuerte personalidad. El Mini Cooper era su principal competidor en cuanto a estilo y sensaciones, aunque con un enfoque más deportivo. Otros modelos como el Volkswagen Polo o el Peugeot 206 ofrecían más pragmatismo, pero carecían del encanto y la exclusividad que solo el pequeño Lancia podía ofrecer con su inconfundible sello italiano.
Conclusión
El Lancia Ypsilon es una compra puramente emocional. Es un coche para quien valora la belleza, la distinción y el placer de conducir algo diferente. No es el más espacioso ni el más práctico, pero su carácter único y su encanto italiano lo convierten en un compañero inolvidable. Es un capricho, un pequeño lujo que te saca una sonrisa cada vez que lo miras y lo conduces.




