Especificaciones y análisis del Maserati 3200 GT
Potencia
368CV
Par
491Nm
Consumo
-l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
5.7s
Vel. Máx.
270km/h
Peso
1695kg
Precio
95,164€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 4v
RWD
4 / 2 puertas
220 L
90 L
271 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Maserati 3200 GT Aut. · 368 CV (1998-2002)
Descripción general
El Maserati 3200 GT no es solo un coche, es el latido de una era. Representa el renacimiento de Maserati bajo una nueva dirección, un puente entre la tradición y el futuro. Con su alma de Gran Turismo italiano, te invita a un viaje donde cada kilómetro es una declaración de estilo y pasión, un eco del glorioso pasado de la marca del tridente.
Experiencia de conducción
Ponerse a los mandos del 3200 GT es desatar una tormenta controlada. El V8 biturbo de 3.2 litros y 368 caballos empuja con una ferocidad que te pega al asiento, un torrente de potencia que la tracción trasera lucha por domar. Su sonido es una ópera mecánica, un rugido profundo que se convierte en un aullido adictivo. Aunque la caja automática de 4 velocidades suaviza su carácter, la aceleración de 0 a 100 km/h en 5.7 segundos sigue siendo visceral. Es un coche que exige respeto y te recompensa con sensaciones puras, sin filtros.
Diseño y estética
La carrocería, obra del maestro Giorgetto Giugiaro, es una escultura en movimiento. Sus líneas fluidas y musculosas combinan elegancia y agresividad de una forma magistral. Pero la verdadera joya, el detalle que lo hace inolvidable, son sus pilotos traseros en forma de 'boomerang'. Son una firma lumínica única en la historia del automóvil, un rasgo de audacia y belleza que define su zaga y lo convierte en un icono instantáneamente reconocible.
Tecnología y características
La tecnología del 3200 GT está al servicio de la emoción. Su corazón es una obra de ingeniería: un V8 de aluminio con 32 válvulas y dos turbocompresores que entregan la potencia de forma explosiva. El chasis no se queda atrás, con una sofisticada suspensión de paralelogramo deformable en ambos ejes que busca el equilibrio entre confort de gran turismo y agilidad deportiva. No encontrarás pantallas táctiles ni ayudas a la conducción modernas; aquí, la tecnología se siente en el asfalto, no en el salpicadero.
Competencia
En su época, se enfrentó a titanes como el Porsche 911 (996) y el Jaguar XKR. Mientras el alemán ofrecía una eficacia clínica y el británico un lujo señorial, el Maserati jugaba en su propia liga: la de la pasión desbordante. Era la alternativa para quien buscaba no solo prestaciones, sino un carácter temperamental, un diseño con alma y el sonido inconfundible de un V8 italiano que te eriza la piel.
Conclusión
El Maserati 3200 GT es una joya para puristas. Un coche con un alma inmensa, que te habla, te desafía y te enamora a partes iguales. Es la esencia del Gran Turismo italiano, una máquina imperfecta pero profundamente carismática que ofrece una experiencia de conducción auténtica y memorable. Poseer uno no es tener un coche, es custodiar un pedazo de historia del automovilismo que se revaloriza con cada mirada.
