Mazda 3 5p Sportive 1.6 CRTD · 109 CV (2008-2009)

2006
Gasóleo
FWD
Manual 5v
Mazda Mazda3 - Vista 1
Mazda Mazda3 - Vista 2
Mazda Mazda3 - Vista 3
Mazda Mazda3 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Mazda Mazda3

Potencia

109CV

Par

240Nm

Consumo

4.8l/100

Emisiones

135g/km

0-100 km/h

11.6s

Vel. Máx.

182km/h

Peso

1325kg

Precio

21,200

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Manual 5v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

346 L

Depósito

55 L

Potencia

80 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima109 CV / 80 kW
Par máximo240 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito55 L
Maletero346 L

Análisis detallado del Mazda 3 5p Sportive 1.6 CRTD · 109 CV (2008-2009)

Descripción general

El Mazda3 5p Sportive 1.6 CRTD de 2006 es un compacto que, a pesar de los años, sigue ofreciendo una propuesta interesante para quienes buscan un equilibrio entre eficiencia y dinamismo. Con su motor diésel de 109 CV, se posiciona como una opción sensata para el día a día y viajes ocasionales, manteniendo la esencia de la marca japonesa.

Experiencia de conducción

Al volante, el Mazda3 1.6 CRTD transmite una sensación de solidez y agilidad. Su motor diésel, aunque no es un derroche de potencia, responde con suficiencia gracias a sus 240 Nm de par desde bajas revoluciones, lo que facilita los adelantamientos y la conducción en ciudad. La dirección hidráulica ofrece un tacto directo y comunicativo, invitando a disfrutar de las curvas. La suspensión, de tipo McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, filtra bien las irregularidades sin sacrificar un comportamiento dinámico, lo que se traduce en un viaje confortable pero con un punto deportivo. Es un coche que se siente bien plantado en la carretera, transmitiendo confianza al conductor.

Diseño y estética

El diseño del Mazda3 de 2006, en su versión de 5 puertas, mantiene una estética atemporal y deportiva. Sus líneas fluidas y su frontal distintivo, con faros alargados y una parrilla que evoca movimiento, le otorgan una personalidad propia. La versión Sportive, aunque no se especifica en los datos, suele añadir detalles que realzan su carácter dinámico. En el interior, la disposición de los elementos es ergonómica y funcional, con materiales que, sin ser lujosos, ofrecen una buena sensación de calidad y durabilidad. Es un diseño que, incluso hoy, no desentona en el tráfico actual.

Tecnología y características

En el apartado tecnológico, el Mazda3 de 2006, como es de esperar para su época, no cuenta con las últimas innovaciones en conectividad o asistentes a la conducción. Sin embargo, incorpora lo esencial para una experiencia de conducción agradable y segura. Su motor 1.6 CRTD con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, es un ejemplo de ingeniería diésel eficiente para su tiempo, logrando un consumo combinado de 4.8 l/100km. La dirección asistida hidráulicamente y los frenos de disco en ambos ejes (ventilados delante) aseguran un control adecuado del vehículo. Aunque no deslumbre con pantallas táctiles, su tecnología mecánica es robusta y probada.

Competencia

En su segmento y época, el Mazda3 1.6 CRTD competía con pesos pesados como el Volkswagen Golf 1.9 TDI, el Ford Focus 1.6 TDCi, el Opel Astra 1.7 CDTI o el Renault Mégane 1.5 dCi. Frente a ellos, el Mazda3 ofrecía una alternativa con un toque más deportivo en su conducción y una fiabilidad mecánica reconocida, aunque quizás con una menor oferta de personalización o una red de servicio menos extensa en algunos mercados. Su diseño distintivo y su enfoque en el placer de conducir lo diferenciaban de sus competidores más generalistas.

Conclusión

El Mazda3 5p Sportive 1.6 CRTD de 2006 es un coche que, a pesar de su edad, sigue siendo una opción muy válida para quienes buscan un compacto diésel fiable, con un consumo ajustado y un comportamiento dinámico que invita a disfrutar de la carretera. Su diseño atemporal y su interior funcional lo hacen práctico para el día a día, mientras que su motor ofrece la potencia necesaria para afrontar viajes con solvencia. Es un coche que, con un mantenimiento adecuado, puede seguir ofreciendo muchas satisfacciones.