Especificaciones y análisis del Mazda Mazda3
Potencia
150CV
Par
360Nm
Consumo
5.4l/100
Emisiones
144g/km
0-100 km/h
9.2s
Vel. Máx.
208km/h
Peso
1465kg
Precio
23,150€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
5 / 4 puertas
430 L
55 L
110 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mazda 3 SportSedán Sportive 2.2 CRTD 150 CV (2010-2011)
Descripción general
El Mazda 3 SportSedán Sportive 2.2 CRTD de 150 CV, un vehículo que irrumpió en el mercado en 2009, se presenta como una opción equilibrada y atractiva para quienes buscan un sedán compacto con un toque deportivo. Este modelo, con su motor diésel de 2.2 litros, ofrece una combinación de eficiencia y rendimiento que lo hace destacar en su segmento. Su diseño, aunque discreto, esconde una personalidad dinámica y un compromiso con la calidad que Mazda siempre ha sabido imprimir en sus creaciones. Es un coche que, sin estridencias, promete una experiencia de conducción gratificante y un confort notable para el día a día.
Experiencia de conducción
Al volante del Mazda 3 SportSedán Sportive, la sensación es de control y agilidad. El motor diésel de 150 CV responde con contundencia desde bajas revoluciones, entregando un par motor de 360 Nm que se traduce en una aceleración de 0 a 100 km/h en 9.2 segundos y una velocidad máxima de 208 km/h. La dirección hidráulica, aunque no es la más moderna, ofrece una retroalimentación precisa, permitiendo sentir la carretera con claridad. La suspensión, tipo McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, filtra las irregularidades del asfalto con eficacia, manteniendo la compostura en curvas y ofreciendo un buen equilibrio entre confort y dinamismo. La caja de cambios manual de seis velocidades es suave y precisa, invitando a una conducción activa y placentera. En general, es un coche que invita a disfrutar de cada trayecto, ya sea en ciudad o en carretera abierta.
Diseño y estética
El diseño del Mazda 3 SportSedán Sportive es una declaración de elegancia discreta y funcionalidad. Sus líneas fluidas y su silueta aerodinámica le confieren una presencia distinguida sin caer en excesos. Los faros, con su diseño afilado, se integran armoniosamente en el frontal, mientras que la parrilla, característica de Mazda, le otorga una identidad reconocible. En el interior, la disposición de los elementos es intuitiva y ergonómica, con materiales de buena calidad que transmiten una sensación de solidez y durabilidad. Los asientos, cómodos y con buen soporte lateral, invitan a largos viajes. Aunque no es un diseño que busque la extravagancia, su estética atemporal y su atención al detalle lo hacen un coche atractivo y funcional.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Mazda 3 SportSedán Sportive de 2009 incorpora soluciones que, para su época, eran bastante avanzadas. Su motor 2.2 CRTD, con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, es un ejemplo de eficiencia y rendimiento. Cumple con la normativa Euro 5, lo que demuestra su compromiso con el medio ambiente. Aunque no cuenta con las pantallas táctiles y los sistemas de infoentretenimiento de última generación, su equipamiento incluye elementos como el control de estabilidad, frenos de disco ventilados en el eje delantero y discos sólidos en el trasero, y un sistema de dirección asistida hidráulica que, si bien no es eléctrica, ofrece una conexión directa con la carretera. Es una tecnología enfocada en la mecánica y la seguridad, priorizando la experiencia de conducción.
Competencia
En el competitivo segmento de los sedanes compactos, el Mazda 3 SportSedán Sportive se enfrentaba a duros rivales como el Volkswagen Jetta, el Ford Focus Sedán, el Opel Astra Sedán y el Honda Civic Sedán. Cada uno de ellos ofrecía sus propias virtudes, pero el Mazda se distinguía por su equilibrio entre deportividad, eficiencia y fiabilidad. Su motor diésel de 150 CV lo posicionaba como una opción potente dentro de su categoría, mientras que su diseño y calidad de acabados lo hacían un contendiente serio frente a las propuestas europeas. Su comportamiento dinámico y su tacto de conducción eran puntos fuertes que lo diferenciaban de algunos de sus competidores más orientados al confort puro.
Conclusión
El Mazda 3 SportSedán Sportive 2.2 CRTD de 150 CV es un coche que, a pesar de los años, sigue siendo una opción muy interesante en el mercado de segunda mano. Ofrece un equilibrio casi perfecto entre rendimiento, eficiencia y placer de conducción. Su motor diésel es potente y frugal, su diseño es atemporal y su interior, aunque no es el más lujoso, es funcional y bien construido. Es un coche que no busca impresionar con artificios, sino que se enfoca en ofrecer una experiencia de conducción sólida y gratificante. Para aquellos que valoran la mecánica bien hecha y un comportamiento dinámico, este Mazda 3 es una elección acertada que promete muchos kilómetros de satisfacción.