Especificaciones y análisis del Mazda Mazda5
Potencia
110CV
Par
310Nm
Consumo
6.1l/100
Emisiones
159g/km
0-100 km/h
13.9s
Vel. Máx.
177km/h
Peso
1535kg
Precio
22,800€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
7 / 5 puertas
426 L
- L
81 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mazda 5 Style 2.0 CRTD 110 CV (2009-2010)
Descripción general
El Mazda5 de 2008, en su versión Style 2.0 CRTD de 110 CV, se presenta como una opción familiar que busca combinar la funcionalidad de un monovolumen con un toque de dinamismo. Este vehículo, con su motor diésel de 110 CV, promete eficiencia y un rendimiento adecuado para el día a día, sin renunciar a la comodidad y el espacio que las familias modernas demandan. Su diseño, aunque discreto, esconde una versatilidad que lo convierte en un compañero de viaje ideal para aquellos que valoran la practicidad.
Experiencia de conducción
Al volante del Mazda5, la sensación es de control y estabilidad. El motor diésel de 110 CV, aunque no es un derroche de potencia, responde con solvencia en la mayoría de las situaciones, ofreciendo un par motor de 310 Nm a 2000 rpm que facilita los adelantamientos y la conducción en carretera. La caja de cambios manual de 6 velocidades permite un manejo preciso y contribuye a una experiencia de conducción agradable. La suspensión, tipo McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, filtra bien las irregularidades del terreno, proporcionando un confort notable para todos los ocupantes. La dirección, de cremallera, ofrece una buena retroalimentación, lo que se traduce en una sensación de seguridad y conexión con la carretera. A pesar de su tamaño, el Mazda5 se muestra ágil en ciudad, con un diámetro de giro de 10.6 metros que facilita las maniobras.
Diseño y estética
El diseño exterior del Mazda5 de 2008 es funcional y discreto, sin grandes alardes estéticos, pero con líneas que denotan solidez y propósito. Sus 4505 mm de longitud, 1755 mm de anchura y 1665 mm de altura le confieren una presencia robusta. Las puertas correderas traseras son un acierto en términos de practicidad, facilitando el acceso a las plazas traseras en espacios reducidos. En el interior, la disposición de los 7 asientos es uno de sus puntos fuertes, ofreciendo una gran modularidad para adaptarse a diferentes necesidades de carga y pasajeros. Los materiales, aunque no son de lujo, transmiten una sensación de durabilidad y están bien ensamblados. La visibilidad es buena desde el puesto de conducción, y la ergonomía de los mandos es intuitiva, lo que contribuye a una experiencia de uso sencilla y agradable.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Mazda5 de 2008 se centra en lo esencial y funcional. Su motor diésel de 1998 cc incorpora inyección directa, turbo de geometría variable e intercooler, tecnologías que optimizan el rendimiento y la eficiencia del combustible. La caja de cambios manual de 6 velocidades es un elemento clave para aprovechar al máximo la potencia del motor. En cuanto a seguridad, cuenta con frenos de disco ventilados de 300 mm delante y discos de 302 mm detrás, garantizando una frenada eficaz. Aunque no incorpora las últimas innovaciones en asistencia a la conducción que vemos hoy en día, su equipamiento es adecuado para la época, ofreciendo lo necesario para una conducción segura y confortable. La ausencia de un sistema Stop&Start es un detalle a tener en cuenta, pero su consumo combinado de 6.1 l/100km es competitivo para su segmento.
Competencia
En el competitivo segmento de los monovolúmenes compactos, el Mazda5 de 2008 se enfrentaba a duros rivales como el Renault Grand Scénic, el Citroën C4 Picasso o el Volkswagen Touran. Frente a ellos, el Mazda5 destacaba por su practicidad, especialmente por sus puertas correderas y la versatilidad de sus 7 plazas. Si bien algunos competidores podían ofrecer interiores más lujosos o una gama de motores más amplia, el Mazda5 se posicionaba como una opción equilibrada, fiable y con un buen comportamiento dinámico, lo que lo hacía atractivo para familias que buscaban un vehículo funcional sin renunciar a una experiencia de conducción satisfactoria.
Conclusión
El Mazda5 2.0 CRTD de 110 CV de 2008 es un monovolumen que cumple con creces su propósito familiar. Ofrece un equilibrio muy logrado entre espacio, funcionalidad y un comportamiento dinámico agradable. Su motor diésel, aunque no es el más potente, es eficiente y suficiente para el uso diario y los viajes largos. La modularidad de su interior y la comodidad de sus puertas correderas lo convierten en una opción muy práctica para familias. Es un coche honesto, sin pretensiones, que se enfoca en lo que realmente importa: transportar a sus ocupantes de forma segura y confortable. Una elección inteligente para quienes buscan un vehículo familiar fiable y versátil.




