Especificaciones y análisis del Mazda Mazda6
Potencia
120CV
Par
165Nm
Consumo
6.8l/100
Emisiones
159g/km
0-100 km/h
11.3s
Vel. Máx.
200km/h
Peso
1355kg
Precio
23,770€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 4 puertas
519 L
64 L
88 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mazda 6 4p Active 1.8 120 CV (2008-2010)
Descripción general
El Mazda6 de 2008, en su versión 4 puertas Active con motor 1.8 de 120 CV, se presenta como una berlina que busca conquistar por su equilibrio y su inconfundible espíritu japonés. Con un precio de 23.770 €, este modelo se posicionaba como una opción atractiva para quienes buscaban un coche familiar con un toque de distinción y una conducción gratificante.
Experiencia de conducción
Al volante, el Mazda6 1.8 de 120 CV ofrece una experiencia de conducción suave y predecible. Su motor de gasolina, aunque no es un derroche de potencia, se muestra voluntarioso y cumple con las expectativas para un uso diario y viajes largos. La dirección es precisa y la suspensión, de paralelogramo deformable en ambos ejes, filtra bien las irregularidades del terreno, proporcionando un buen compromiso entre confort y agilidad. La caja de cambios manual de 5 velocidades es un placer de usar, con inserciones rápidas y precisas que invitan a disfrutar de cada cambio. La aceleración de 0 a 100 km/h en 11.3 segundos y una velocidad máxima de 200 km/h son cifras adecuadas para su segmento, sin pretensiones deportivas, pero con la capacidad de desenvolverse con soltura en cualquier situación. El consumo combinado de 6.8 l/100km es razonable para un motor de gasolina de su cilindrada.
Diseño y estética
El diseño del Mazda6 de 2008 es elegante y atemporal. Sus líneas fluidas y su silueta aerodinámica le otorgan una presencia distinguida en la carretera. La versión de 4 puertas, con sus 4735 mm de longitud, 1795 mm de ancho y 1440 mm de alto, ofrece una estampa imponente pero equilibrada. Los detalles como las llantas de 17 pulgadas con neumáticos 215/50 R17 contribuyen a su imagen deportiva y sofisticada. El interior, aunque no se detalla en los datos, se espera que siga la filosofía de Mazda de ofrecer un habitáculo funcional, bien acabado y con una ergonomía cuidada, donde la calidad de los materiales y el ajuste de las piezas sean protagonistas.
Tecnología y características
En cuanto a tecnología, el Mazda6 de 2008 incorpora un motor de gasolina de 1.8 litros con inyección indirecta y 4 válvulas por cilindro, que entrega 120 CV de potencia y 165 Nm de par. El bloque y la culata son de aluminio, lo que contribuye a un peso contenido de 1355 kg. La tracción delantera y la transmisión manual de 5 velocidades aseguran una conducción eficiente y directa. En el apartado de seguridad, cuenta con frenos de disco ventilados de 299 mm delante y discos de 280 mm detrás, garantizando una frenada eficaz. La suspensión independiente en ambos ejes y las barras estabilizadoras contribuyen a un comportamiento dinámico seguro y confortable. Aunque no se especifican los sistemas de asistencia a la conducción, es de esperar que incluya los elementos de seguridad activa y pasiva habituales en su segmento para la época.
Competencia
En el competitivo segmento de las berlinas medias, el Mazda6 1.8 de 120 CV se enfrentaba a duros rivales como el Ford Mondeo, el Opel Insignia, el Volkswagen Passat o el Toyota Avensis. Cada uno con sus propias fortalezas, el Mazda6 destacaba por su diseño distintivo, su tacto de conducción más deportivo y su reputación de fiabilidad. Frente a ellos, ofrecía una alternativa con un enfoque más emocional y una calidad de construcción que no tenía nada que envidiar a sus competidores europeos.
Conclusión
El Mazda6 de 2008 en su versión 1.8 de 120 CV es una berlina que combina elegancia, confort y un toque de dinamismo. Es una opción ideal para aquellos que buscan un coche familiar con un diseño atractivo, una conducción placentera y la reconocida fiabilidad de la marca japonesa. Su equilibrio general lo convierte en una propuesta muy interesante dentro de su segmento, ofreciendo una experiencia de propiedad satisfactoria y un valor duradero.




