Especificaciones y análisis del Mazda Mazda6
Potencia
129CV
Par
340Nm
Consumo
5l/100
Emisiones
133g/km
0-100 km/h
10.9s
Vel. Máx.
195km/h
Peso
1550kg
Precio
28,100€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
5 / 5 puertas
510 L
64 L
95 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mazda 6 5p Style 2.2 CRTD 129 CV (2012)
Descripción general
El Mazda6 de 2010, en su versión de 5 puertas Style con motor 2.2 CRTD de 129 CV, se presenta como una berlina que busca combinar la funcionalidad con un toque de distinción. Con un precio de 28.100 euros en su lanzamiento, este modelo se posicionaba como una opción interesante para quienes buscaban un vehículo diésel con buenas prestaciones y un diseño atractivo, sin caer en la ostentación de las marcas premium. Su enfoque en la eficiencia y la dinámica de conducción lo convertían en un contendiente a tener en cuenta en el segmento de las berlinas medias.
Experiencia de conducción
Al volante, el Mazda6 2.2 CRTD de 129 CV ofrecía una experiencia de conducción equilibrada. El motor diésel, con sus 340 Nm de par a 1800 rpm, proporcionaba una respuesta enérgica desde bajas revoluciones, ideal para adelantamientos y recuperaciones. La aceleración de 0 a 100 km/h en 10.9 segundos y una velocidad máxima de 195 km/h, aunque no lo convertían en un deportivo, sí garantizaban un rendimiento más que suficiente para el día a día y los viajes largos. La suspensión, de paralelogramo deformable tanto delante como detrás, junto con la dirección asistida eléctrica, contribuían a una sensación de agilidad y control, haciendo que cada trayecto fuera placentero. El consumo combinado de 5 l/100km era un punto fuerte, prometiendo una buena autonomía y eficiencia.
Diseño y estética
El diseño del Mazda6 de 2010 mantenía la línea estética de la marca, con una silueta elegante y deportiva a la vez. La versión de 5 puertas ofrecía una practicidad adicional sin sacrificar la armonía visual. Sus dimensiones, con 4755 mm de largo, 1795 mm de ancho y 1440 mm de alto, le otorgaban una presencia imponente en la carretera. Las llantas de 17 pulgadas con neumáticos 215/50 R17 complementaban su aspecto dinámico. El interior, aunque no se detalla en los datos, se esperaba que siguiera la filosofía de Mazda de ofrecer un habitáculo funcional y bien acabado, con una ergonomía cuidada para el conductor y los pasajeros. El maletero de 510 litros era generoso, ideal para las necesidades de una familia.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Mazda6 2.2 CRTD de 129 CV incorporaba un motor diésel de inyección directa por conducto común, turbo con geometría variable e intercooler, lo que garantizaba una combustión eficiente y un buen rendimiento. La transmisión manual de 6 velocidades permitía un control preciso sobre la entrega de potencia. Aunque no se mencionan sistemas avanzados de asistencia a la conducción, el vehículo contaba con una dirección asistida eléctrica y un sistema de frenos con discos ventilados delanteros de 299 mm y discos traseros de 280 mm, asegurando una buena capacidad de frenado. La suspensión independiente en ambos ejes contribuía a un comportamiento dinámico y confortable.
Competencia
En el competitivo segmento de las berlinas medias, el Mazda6 2.2 CRTD de 129 CV se enfrentaba a duros rivales como el Ford Mondeo, el Opel Insignia, el Volkswagen Passat o el Toyota Avensis. Cada uno de ellos ofrecía sus propias virtudes en términos de espacio, equipamiento o dinámica de conducción. El Mazda6 se distinguía por su enfoque en la deportividad y la eficiencia, ofreciendo una alternativa atractiva para aquellos que valoraban una experiencia de conducción más conectada y un diseño distintico dentro de la categoría.
Conclusión
El Mazda6 5p Style 2.2 CRTD de 129 CV de 2010 era una berlina que destacaba por su equilibrio entre rendimiento, eficiencia y diseño. Su motor diésel ofrecía una respuesta contundente y un consumo contenido, mientras que su chasis proporcionaba una conducción ágil y confortable. Aunque no era el más potente de su segmento, su conjunto lo convertía en una opción muy sensata para quienes buscaban un coche fiable y agradable de conducir para el día a día y los viajes largos. Un vehículo que, sin duda, dejaba una grata impresión por su compromiso con la calidad y la experiencia al volante.